jueves, 29 de agosto de 2019

Natillas con galleta

                                                                                         

Este es uno de los postres mas ricos y sencillos, si se tiene tiempo para remover la crema durante unos 45 minutos, que se puedan preparar.

El complemento de la galleta le da un toque crujiente, y le queda bien a la suave textura de las natillas. Es uno de mis postres preferidos. 


Ingredientes                                             


750 ml de leche
100 g de azúcar
8 huevos
unas gotas de esencia de vainilla
Galletas maría
Canela en polvo

Elaboración


Separar 250 ml de leche y poner el resto a calentar en un cazo.

Agregar, la esencia de vainilla y el azúcar y cocerlo todo a fuego lento durante 2 minutos. Apagar el fuego, tapar el cazo y dejar reposar 30 minutos.

Separar las claras de las yemas de los huevos y batir las yemas, añadir el vaso de leche reservado y mezclar bien.

Calentar de nuevo. Cuando haya calentado un poco añadir las yemas batiendo suavemente para que se mezclen bien, con el fuego bajo, impidiendo que hierva en ningún momento.
                                                                         

Cuando la espuma haya desaparecido y la mezcla comience a espesar en 3 o 4 minutos retirar del fuego y rellenar los recipientes necesarios.

Colocar una galleta en cada recipiente y espolvorear con un poco de canela en polvo encima.
                                                                                 


jueves, 22 de agosto de 2019

El Boalo

                                                                       
En la primavera de hace tres años, estábamos en Madrid y por circunstancias que no vienen al caso tuvimos que llevar a mis nietas a pasar su mañana de domingo, como hacían todas las  semanas, para montar y cuidar de sus adorados caballos, en un picadero de El Boalo.
                                                                   

Con ayuda del GPS llegamos a este pueblo, y luego con las indicaciones de las niñas, al propio picadero, en las afueras de El Boalo.

Me alegre de haber tenido oportunidad de conocer estos bellos parajes de la Sierra de Guadarrama, pues, de verdad, que vale la pena.

Cuando las dejamos en el picadero, donde tenían para bastante rato, nos fuimos a dar una vuelta por los alrededores.

El lugar está presidido por la montaña de la Maliciosa, una de las mas importantes, altas, significativas y vistosas de la Sierra de Guadarrama, con una altitud de 2.227 sobre el nivel del mar.

La Maliciosa debe su nombre a la dificultad de su ascenso, excepto por la cara norte, que nosotros no veíamos, pues El Boalo se encuentra al pie de la cara sur de la montaña.
                                                   

Su principal caserío El Boalo, precisamente, está a 980 m de altitud sobre el nivel del mar y el termino se extiende por la ladera sur de la Sierra de Guadarrama, presidido como ya hemos visto por la gran montaña de la Maliciosa.

El nombre de El Boalo proviene de un vocablo que significa "dehesa boyal".

Todo el entorno tiene una maravillosa naturaleza.
                                                                     

Digamos unas palabras mas sobre este municipio de la provincia de Madrid.

El municipio consta de tres núcleos urbanos, El Boalo, Cerceda y Mataelpino, cuyo origen se sitúa en la Reconquista, cuando la vertiente meridional de la sierra de Guadarrama fue repoblada por la Comunidad de la Villa y Tierra de Segovia.

Las primeras referencias escritas sobre el núcleo de El Boalo datan del siglo XV, ya que aparece en la Serranilla V, de la obra Las Serranillas de Iñigo López de Mendoza, Marques de Santillana (1.398-1.458), como vemos en esta pequeña muestra de su arte literario

"Descendiendo Yelmo ayuso, contra Bóvalo* tirando, en ese valle de suso, vi serrana estar cantando"

* Boalo

En 1.833 cuando se efectuó la división de España en provincias, las tres entidades del municipio quedaron integradas en  la provincia de Madrid.

Las principales fuentes de subsistencia fueron, durante siglos, la agricultura y la ganadería; actualmente se ha producido un florecimiento económico debido a la expansión del sector inmobiliario, con la urbanización de numerosos enclaves del entorno, y el consiguiente aumento de residentes, muchos de ellos procedentes de Madrid; aunque los sectores tradicionales agrícola y ganadero siguen siendo importantes.

Aunque el municipio pertenece a la Cuenca del Guadarrama, ninguno de sus riachuelos y arroyos vierte en este río, sino que son afluentes o subafluentes del río Manzanares, a cuya cuenca hidrográfica pertenece; los mas importantes de los cuales son el río Samburiel y los arroyos de El Palancar y Navahuerta, sometidos a un fuerte estiaje, que los hace secarse en verano.

El Ayuntamientto está situado en El Boalo, que con los otros dos núcleos del municipio llega a los 6.250 habitantes.

Uno de sus mas ilustres vecinos fue la escritora Carmen Martín Gaite (1.925-2.000), una de la figuras mas importantes de las letras hispánicas del s. XX, que vivió en la casa familiar de El Boalo los últimos años de su vida, y allí está enterrada junto con sus padres y su hija,
                                                             

Pasamos delante de la casa familiar y residencia de los últimos años de la escritora, donde vivió con su hermana Ana María, fallecida en el mes de mayo de este mismo año 2019.

Como albacea de su hermana, Ana Mª se ocupo de mantener viva la obra de la escritora, Premio Príncipe de Asturias 1.988 y Premio Nacional de Literatura 1.994.

En al casa de El Boalo, Ana Mª reunió cuadernos de trabajo y una ingente cantidad de material sobre la labor literaria de Carmen, que sirvió para que se escribieran varios libros sobre la escritora.

Además en 2.016 puso en marcha junto con el Ayuntamiento de El Boalo el premio de Narrativa Carmen Martín Gaite, para paliar el olvido en que iba cayendo tanto la obra de su hermana, como la de sus coetáneos de la generación de los 50.

Ana Mª también creo un Centro de Estudios de la autora, en la propia casa, en el que están recogidos, además de sus restos, la  biblioteca, archivos, muebles y objetos que Carmen Martín  Gaite tenía en Madrid, donde vivió una gran parte de su vida, y que es objeto de visitas organizadas desde su creación.

Ahora Ana María también descansa en esta casa de El Boalo.

El lugar de El Boalo donde pasamos gran parte de la mañana, además de los paseos, fue en la cercanías y al lado de uno de los monumentos del entorno, la Ermita de San Isidro
                                                                       

Esta ermita es reciente, ya que fue levantada en el s. XX por los propios vecinos de El Boalo, en honor de San Isidro Labrador, patrón de los agricultores y ganaderos, como recuerdo de otras épocas en que los vecinos se dedicaban principalmente, a estas dos actividades. Esta enclavada en un precioso paisaje al pie de la Sierra.
                                                                                   

Cada 15 de mayo, festividad de San Isidro se celebra allí una romería.

Poco después de nuestro paseo por todos estos lugares recogimos a las niñas y volvimos a Madrid

Bonita excursión e interesante lugar.

jueves, 15 de agosto de 2019

Pollo relleno de frutas

                                                                         

Buena combinación de sabores, que suele ser del agrado de todos, menos pesada que otras carnes y adecuada para las comidas de Navidades u otras celebraciones.

Ingredientes



1 pollo
4 manzanas
1/ taza de orejones
2 cucharadas de miel
1/2 limón
Orégano, romero, pimienta
1 vasito de vino blanco
1 cabeza de ajos + 2 dientes de ajo
aceite
sal

Elaboración


Lavar las manzanas, pelarlas y cortar cada una en seis gajos.

Salpimentar el pollo por dentro y por fuera e introducir en su interior la mitad de las manzanas, la mitad de los orejones y el limón. Cerrar con un palillo y colocarlo en una fuente de horno junto con la cabeza de ajos.

Hornear 15 minutos a 220ªC. Regar a continuación con el vino, bajar la temperatura a 170ºC y hornear  durante 1 hora y media.
                                                                   

Mientras se asa el pollo, saltear durante 3 minutos el resto de las manzanas hasta que empiecen a estar doradas.

Cuando el pollo este asado, sacarlo del horno e incorporar las manzanas salteadas a la fuente y el resto de los orejones.

Pincelar el pollo con la miel, espolvorearlo de orégano y de romero.

Poner de nuevo en el horno durante 15 minutos a 180ºC.

Sacar el pollo del horno, taparlo con papel de horno y dejarlo reposar 10 minutos antes de trincharlo y servirlo acompañado con el relleno, la guarnición, y los jugos en salsera.

jueves, 8 de agosto de 2019

Belorado, 2ºdia


Después de asistir a la Eucaristía, ya que en un convento estábamos, con su preciosa iglesia y con los cantos de las religiosas, seguida de un excelente desayuno preparado por las monjitas, nos despedimos de los amigos y fuimos al centro del pueblo para hacer lo que, podíamos decir, la visita turística.

Nos llegamos hasta la Plaza Mayor, corazón de Belorado, de aspecto típicamente castellano; es una hermosa plaza, donde en tiempos se hacia el mercado semanal y las ferias anuales, concedidas por los reyes, lo que explica su gran tamaño.

 Esta constituida como un espacio cerrado, ya que los accesos son laterales, de manera que no hay que atravesarla, por lo  sirvió también, en otros tiempos, para corridas de toros, comedias, bailes y festejos variados.
                                                                               

Es en parte porticada, tiene varias casas blasonadas y en el centro hay un templete para conciertos.

En la plaza Mayor se encuentran como edificios principales el Ayuntamiento,
                                                                         

y la iglesia de San Pedro
                                                                       

Este templo de probable origen medieval, muy reformado en el s. XVII al que se llega subiendo una pequeña escalinata; en el lado izquierdo se alza la torre, de planta cuadrada, construida en ladrillo y añadida en el s. XVIII; solo contemplamos la iglesia por fuera, pero en su interior tiene diversos tesoros.

La plaza mayor estaba animada, con varias terrazas que correspondían a distintos bares, bastante llenas con los naturales del lugar.

Como teníamos intención de seguir camino hasta llegar a casa, no nos detuvimos mas que un rato, y en la misma barra, de una de las tascas, tomamos unas tapas que nos sirvieron de comida.

Entre los dos días que había tenido para recorrer Belorado, ya me fui con suficiente información para apreciar una de las importantes villas de la historia de Castilla y de España.

jueves, 1 de agosto de 2019

Dos días en Belorado, Burgos


Esta visita a Belorado, la primavera pasada no era la primera. Hace años, al pasar de camino hacia Oviedo, entramos en este pueblo, famoso entonces y ahora, por su trabajo en piel y tanto mi marido como yo compramos sendos abrigos de piel vuelta y grueso forro, que nos han hecho buen servicio, y yo todavía conservo.

En la ocasión actual, en cambio, hemos conocido bastantes cosas interesantes de  Belorado.

El motivo de nuestra visita era una reunión con varios amigos de distintos lugares del norte de España, que son protectores y contribuyentes económicos del monasterio de clarisas ubicado en el pueblo, y  pasar dos días juntos.

Nos hospedamos en la extensión del monasterio, que es una pequeña ala exenta del edificio histórico, pero todas las comidas las hicimos en el propio convento, preparadas divinamente, valga la expresión, por las monjitas.

Sepamos ahora algo de Belorado y del propio monasterio.

Belorado municipio de la provincia de Burgos, limítrofe con La Rioja, pertenece a la comarca de Montes de Oca, y a la subcomarca de La Riojilla; se encuentra en la falda de la Sierra de la Demanda, al pie de los Montes de Ayago; su principal cauce fluvial es el río Tirón, afluente del Ebro. que nace en la mencionada Sierra de la Demanda. la villa cuenta con cerca de 2.000 habitantes.
                                                                   

En 2.015 la Unesco incluyo, en la denominación Patrimonio de la Humanidad, la ampliación del Camino de Santiago, que aumento en unos 1.500 km, Belorado entro en el Camino francés y en los Caminos del Norte de España, recuperando la importancia que tuvo en el Camino de Santiago, puesta de nuevo de relieve actualmente.

Se cree que antes de la llegada de los romanos la zona estaba poblada por la tribu de origen celta de los autrigones, aunque el primitivo núcleo urbano es de fundación romana.

De estas lejanas épocas se han encontrado restos arquelógicos, como lápidas. cerámicas y otros; aunque el opida romano estaba situado en la otra orilla del río Tirón, que en su actual emplazamiento.

Pocos indicios hay del periodo visigodo, que pueden ser los restos eremíticos encontrados en las cuevas de la zona.

Belorado tuvo especial importancia al comienzo de la Reconquista por su situación estratégica, al ser el paso natural entre el Valle del Ebro y la Meseta, para cuyo control se construyo el castillo, del cual apenas queda un murallón terroso, sobre un cerro y a cuyo pie se traslado la población, para tener mayor protección.

La zona fue inestable hasta que el rey Alfonso III de Asturias (848-910) aseguro definitivamente la frontera oriental y pudo comenzar la repoblación cristiana a comienzos del s. X. A partir de ese siglo el conde Fernán González, y varios reyes de Navarra y Aragón le concedieron privilegios como mercado, fueros, la feria mas antigua de España, fuentes de su prosperidad durante la Edad Media.

Sin embargo la primera referencia documental se encuentra a finales del s. X, en un documento perteneciente al Monasterio de San Millán de la Cogolla, La Rioja, en el que se la menciona con el nombre de Bilforato.

En la Edad Moderna Belorado perteneció a los Condestables de Castilla, el primero del título fue don Pedro Fernandez de Velasco (1.425-1.492), I conde de Haro, a partir del cual el titulo de Condestable fue hereditario.

En el s. XVI con la perdida de importancia del Camino de Santiago, tras la ruptura de la unidad religiosa en Europa, y en los siglos siguientes, aumentó el declive de Belorado debido a epidemias, malas cosechas y crisis económicas y demográficas, no ajenas a la crisis en todo el territorio de Castilla.

Cierta recuperación se inicio en el s. XVIII con nuevos aprovechamientos agrícolas y forestales, recuperación que se vio drasticamente interrumpida con la invasión napoleónica, con su secuela de batallas, robos, violaciones y destrucción del patrimonio nacional.

La despoblación de la cuenca Oca-Tirón durante la década de los 60-70 del s. XX, manifiesta el profundo declive de la zona, de la cual solo pervive entre otros pocos pueblos, Belorado.

Volvamos ahora al convento de clarisas donde nos alojamos.


El monasterio de Santa Clara, también conocido como Nuestra Señora de la Bretonera, por llamarse así el solar donde fue construido, está situado en las afueras de la villa, y en el Camino de Santiago.

El origen del convento fue la decisión de unas piadosas mujeres de vivir en comunidad bajo la Regla de Santa Clara, en 1.358,  para lo cual pidieron y obtuvieron una bula papal que autorizaba la fundación, y para lo cual construyeron un monasterio en ese lugar.

Después de diversos acontecimientos, destrucciones y ruinas, como que durante la Guerra de la Independencia las religiosas tuvieran que abandonar el monasterio, que fue objeto de expolio y destrucción por parte de las tropas francesas, y mas tarde la Desamortización del año 1.835, que desposeyo  a la comunidad de todas sus propiedades, las monjas solo pudieron sobrevivir gracias a algunos caritativos vecinos, que las dotaron

La comunidad actual compuesta por 14 monjas, ha rehabilitado el convento, literalmente con sus propias manos, y lo tiene, francamente, en forma. Para financiar su mantenimiento, así como la vida monástica, se autofinancian con las trufas y bombones que venden en tiendas gourmet y en restaurantes con estrellas michelin, lo que garantiza su calidad.
                                                                   

En el obrador del convento dedican parte de su tiempo a la elaboración de trufas, palitos y bombones de alta gama, hechos con el mejor chocolate. Puedo decir que tienen la fama merecida ya que compramos una caja surtida, para conocer esa delicia.
                                                                       
                                                                   
 Mientras mis amigos asistían a las convivencias y hablaban de sus intereses, yo me di una vuelta por la población, que me pareció bien cuidada y próspera. Observe que seguía habiendo varias grandes tiendas dedicadas a confección en piel, con toda clase abrigos, chaquetas y complementos en piel.

La visita mas turística la deje para el día siguiente, para hacerla en compañía de mi marido.