martes, 29 de noviembre de 2016

Tronco navideño de browine de chocolate, nueces y castañas

                                                     

Ya hay que ir pensando en la Navidad, y he pensado, despues de repasar varias recetas en este falso tronco de Navidad que es mas bien un postre, pero que con algunos adornos, puede pasar por uno. Es muy fácil y queda rico.

Ingredientes
                                                         

Para el brownie

150 g de mantequilla
85 g de chocolate del 72%
3 huevos
180 g de azúcar
60 g de crema de castañas
60 g de harina
80 g de nueces
60 g de castañas en almíbar

Para la crema de decoración

20 g nata
20 g de queso mascarpone
50 g de crema de castañas
castañas en almíbar
bolitas doradas

Elaboración

Batir los huevos, el azúcar y la crema de castañas.
                                                   

Fundir el chocolate, añadir la mantequilla y mezclar hasta que quede todo bien liso. Añadir al batido anterior.
                                                                       

Incorporar sucesivamente la harina tamizada, las nueces un poco picadas y las castañas en almíbar cortadas en daditos.

Poner la masa en un molde rectangular, y hornear en horno precalentado a 180ºC durante 40 minutos, probando la cocción con una aguja, que tiene que salir limpia.
                                                       

 Esperar que se enfríe para desmoldarlo.
                                                           
Para la crema de decoración, batir la nata hasta que monte, añadir el mascarpone y la crema de castañas y batir hasta incorporación de todo. Con ayuda de una manga pastelera decorar el brownie, con este chantilly y poner por encima castañas en almíbar con unas bolitas doradas encima de cada una.

Decorar al gusto, yo he puesto algunos marrón glasé, que suelen tener gran aceptación.
                                                           

martes, 22 de noviembre de 2016

Toledo. Exposición de El Greco "Arte y oficio", el Alcazar, la Catedral


Hace un par de años hicimos una visita a Toledo para ver la segunda exposición dedicada al Greco, que commemoraba su IV centenario

Conozco Toledo, podría decir, desde siempre. Lo visite de niña con mis padres, volví cuando estudiaba en la Universidad de Madrid y varias veces mas, pero esta vez tenia el aliciente de la exposición y del traslado desde Madrid en el tren AVE, que tarda solamente 30 minutos.

Nos acompaño, como en otras excursiones por las cercanías de Madrid nuestro primo A. que ya había visitado la exposición, pero que no tenia ningún inconveniente en verla otra vez. Así que con sus indicaciones tomamos un taxi en la estación del tren, ya en Toledo y llegamos sin demora al Hospital de La Santa Trinidad, sede de la muestra.

Antes de adentrarnos en ella digamos dos palabra sobre Toledo, que bien las merece.

Toledo ciudad de cerca de 85.000 habitantes, capital de la provincia homónima se encuentra en la comarca de La Sagra, tierra llana, suavemente ondulada, que solamente llega a 600 m de altitud media.

La ciudad esta situada en la orilla derecha del Tajo, en una colina de 100 m de altura sobre el río, que la ciñe por su base formando un pronunciado meandro conocido como el Torno del Tajo.


La historia de la ciudad se remonta a la Edad del Bronce, en la que fue un importante núcleo carpetano, tribu celtibera anterior a la conquista romana; quedan tambien muestras arqueológicas de los romanos, como el acueducto y el circo.

Despues de las invasiones germánicas, la ciudad se convertirá en  capital  con Leovigildo, rey de los visigodos, y en la sede episcopal mas importante del Reino Visigodo.

Tras la invasión musulmana de 711, quedo en poder de estos hasta la reconquista de Alfonso VI de León para los cristianos, en 1.085.

Durante la Edad Moderna Toledo destaco como sede de los Reyes Católicos y posteriormente durante las Guerra de los Comuneros, en la que encabezo la rebelión junto con Valladolid, contra Carlos I, con las desastrosas consecuencias que supuso la derrota y ejecución de los principales lideres de la rebelión y las sanciones posteriores que debilitaron la pujanza de Castilla y acabaron con su predominio.

Al trasladarse la capital a Madrid en 1.561 la ciudad entro en decadencia, acentuada por la crisis del momento.

Durante la invasión napoleónica Toledo sufrió enormemente, citare para ilustrarlo alguna de las palabras de Juan Manuel Magán (Barcelona 1.978)  DJ, compositor, letrista , cantante y productor discográfico, en el articulo "Toledo y la Guerra de la Independencia. Reseña de noticias diversas sobre la repercusión de la Guerra de la Independencia en Toledo y su provincia" publicado en Internet: http://edu.jccm.es/invento.

-"En la memoria histórica de Toledo y su provincia quedaron marcados los amargos recuerdos del paso de las tropas de Dupont, Victor, Valence y Soult. Su huella quedo indeleble en forma de destrucción, saqueo, extorsión y ultraje. Algunos de los enfrentamientos bélicos de particular significación en el desarrollo del conflicto se libraron en suelo toledano"-

Entre otros destrozos profanaron las tumbas de los Reyes godos, buscando tesoros y acabaron derruyendo el convento de agustinos donde estaban enterrados, y estuvieron a punto de destruir completamente la ciudad, al incendiar el Alcázar, donde estaban almacenadas armas y pólvora.

La Guerra de la Independencia, paradigma de las guerras modernas, empobreció a España, esquilmo su patrimonio histórico y retraso en varias décadas su desarrollo económico.

Tradicionalmente la metalurgia ha sido parte importante de la economía de Toledo, principalmente la confección de espadas y cuchillos, aunque hoy día el turismo y los servicios forman parte de la misma.

En cuanto a su patrimonio cultural es una de las ciudades españolas con mayor riqueza monumental, de la cual forman parte iglesias, palacios, fortalezas, etc., que convierten su casco antiguo en verdadero museo al aire libre; por todo esto fue nombrada Patrimonio de la Humanidad en 1.986.

Ha sido lugar de nacimiento y residencia de literatos como Garcilaso de la Vega, y de pintores como El Greco, entre otros muchos.

Como cosa curiosa anotare que su nombre se ha esparcido por el mundo, ya que hay cinco ciudades de E.E.U.U. que lo llevan en los estados de Illinois, Iowa, Oregon y Washington, otras siete de diversos países como Belice, Brasil, Canadá, Colombia, Filipinas, Portugal y Uruguay, además de cuatro núcleos mas en España en las provincias de Asturias, Huesca, Orense y Tenerife. Con el Toledo original castellano manchego, dieciséis en total.

Ya estábamos delante del Museo de Santa Cruz, sede de la exposición.
                                                 

Importante es la exposición, pero no le va a la zaga el imponente edificio del Museo, que ocupa el que fue Hospital de la Santa Cruz.

El Hospital de la Santa Cruz fue fundado por el Cardenal Mendoza (1.428-1.4895), una de las figuras mas importantes de su época, a principios del s. XVI, para asilo de niños abandonados, y asistencia a transeúntes enfermos y desamparados, aplicando las nuevas ideas de higiene y ventilación, que mejoraban mucho a los asilos medievales.

Funcionó como hospital hasta 1.846, en que paso a ser Colegio Militar, y después de vicisitudes y desastres que a punto estuvieron de acabar con este magnifico edificio, es, desde 1.961, Museo.

Sus arquitectos iniciales fueron los arquitectos toledanos Antón y Enrique Egas y mas tarde Alonso de Covarrubias; su estilo es renacentista, con ornamentación plateresca.

En este histórico edificio se ha desarrollado del 8 de septiembre al 9 de diciembre de 2.014 una de las muestras dedicadas a commemorar el IV centenario de fallecimiento de El Greco, con el nombre de "El Greco: arte y oficio".
                                                                   

 Domenikos Theotokopulos, El Greco(1.541-1.614), nació en la isla de Creta, Grecia, donde desarrollo una carrera de pintor de iconos posbizantinos; paso los diez años siguientes primero en Venecia, donde aprendió pintura al oleo con Tiziano y Tintoretto, y luego en Roma, donde conoció la obra de Miguel Ángel y el manierismo; su estilo paso entonces a ser renacentista, aunque interpretado de una forma personal y original.

Seguidamente se estableció en Toledo, donde residió y trabajo los siguientes treinta y siete años, hasta su muerte.

Actualmente está considerado como uno de los mas grandes pintores europeos, aunque en su época y durante varios siglos después, fue considerado como un pintor excéntrico, por su originalidad, dentro de la Historia del Arte.

La exposición muestra 92 obras, 70 cuadros de El Greco, 6 de su hijo Jorge Manuel y el resto del taller del pintor y de artistas tan relevantes como Orrente y Tristán, ya que se trata de mostrar al maestro, figura central, y su taller, con sus ayudantes, discípulos y aprendices, sin los cuales no sería hubiera sido posible realizar la gran cantidad obras maestras que nos ha legado para la posteridad.

Entre otras consideraciones sobre las obras mostradas, traídas de diferentes ciudades del mundo, la exposición es excepcional, por reunir por primera vez, los cuatro apostolarios mas completos que se conservan del artista:

El Apostolario del Marqués de San Feliz, del Museo de Bellas Artes de Asturias, en Oviedo.
                                                             

El Apostolario de Almadrones, Guadalajara, hoy día disperso por diferentes países y reunido para la ocasión
                                                                           

El Apostolario de la Sacristía de la Catedral de Toledo
                                                                                                           
                                                           
El Apostolario del Museo del Greco, en Toledo.
                                                                 
.
Los cuatro parecidos, pero distintos, colocados los cuadros enfrente unos de otros, para que al pasar se pueda comparar, apóstol con apóstol.

Toda la exposición muestra interés en que podamos comparar obras de similar temática y tratamiento parecido, pero todas distintas. 

Todos los cuadros están restaurados y se pueden contemplar casi como recién acabados. El Greco siempre me ha entusiasmado y ver todos estas lienzos tan magníficamente colocados y expuestos me ha gustado muchísimo.

 Es un disfrute para la vista todos esos ropajes de vivos colores , todos esos personajes en la interpretación tan original del pintor...


                                                                 

Otro aspecto que hay que reseñar es el montaje de la exposición obra del arquitecto Juan A.García de Cubas (Madrid, 1.966) que ha sido articulado en los cuatro brazos del crucero inferior, con cuatro capítulos; "De la mano del Greco", "Invención e interpretación", "Apóstoles y Apostolados" y El Greco despues del Greco", con obras que ilustran los cuatro apartados.

Magnifica exposición, magnifica presentación con un recorrido didáctico que añade al placer visual.

Después de dos horas de visita lenta y atenta dejamos el Hospital de Santa Cruz y dimos un largo paseo hasta llegar a uno de los edificios emblemáticos de Toledo, el Alcázar.




El Alcázar es una fortificación situada en la parte mas alta de la ciudad. Su privilegiada situación le ha dado un gran valor estratégico, que aprovecharon los diversos pueblos que habitaron la zona y se establecieron en él

                                                                       
Su nombre viene del árabe Al-Qasar que quiere decir, precisamente, fortaleza.

En el s. III fue un palacio romano donde fue establecido el pretorio, sede del magistrado o pretor, cargo que venia después del de cónsul.

El rey visigodo Leovigildo (519-586) estableció en Toledo su capital en el año 568, de manera que a partir de entonces se construyeron en la ciudad residencias regias e iglesias como la de Santa Leocadia, en la que, además de la tumba de la santa están las de los reyes Wamba, Recesvinto y Chindasvinto.

El emir Abderraman II y el califa Abderraman III, realizaron obras en el Alcázar en los años 836 y 932 respectivamente.

Fue restaurado y ampliado durante el reinado de su reconquistador Alfonso VI, de León (1.040-1.109) en 1.085, y de sus sucesores Alfonso VII y Alfonso VIII.
                                                                   

Fernando III, el Santo, de León y Castilla (1.201-1.252) lo embelleció considerablemente y su hijo Alfonso X el Sabio fundo y estableció en el Alcázar la Escuela de Traductores de Toledo, con su ingente labor de traducción de textos greco-latinos que habían sido vertidos al árabe y hebreo, al latín y al castellano.

A partir del s XIV el Alcázar fue elegido por los reyes de la dinastía Trastámara como residencia real, que continuaron con los reformas, sobre todo del interior durante los reinados de Pedro I, Juan II, Enrique IV y los Reyes Católicos.

Cuando cambio la dinastía y el nuevo rey Carlos I de Habsburgo llegó a España, convocó en el Alcázar de Toledo las Cortes y también modificó la fortaleza en 1.535, obra que encargo a los arquitectos Covarrubias, Villalpando y Herrera, que le dieron su aspecto actual, diseñando un edificio compacto y cerrado embellecido con las fachadas norte y sur y un gigantesco escudo imperial.

Sufrió al menos dos incendios, pero el mayor de los desastres para el Alcázar, así como para todo el país fue la invasión de las tropas napoleónicas, ya que el ejército francés mantenía un gran contingente de hombres y artillería en el Alcázar, y que sin que se sepan las causas sufrió el mayor incendio de sus historia, quedando en pie solamente su estructura.

Después de comenzadas las obras dereedificación, que trancurrieron lentamente, debido a los transtornos políticos del s. XIX, en 1.878 se instalo en el Alcázar la Academia de Infantería de Toledo.

Otro terrible incendio en 1.887 lo destruyo, de nuevo, casi por completo.

Durante la Guerra Civil (1.936-1.939) el coronel José Moscardó se atrinchero junto con la Guardia Civil en el Alcázar que resulto, nuevamente, casi destruido por las tropas de la República, con un asedio que duro sesenta días ( 2 de julio-27 de septiembre de 1.936). Aun pueden verse incrustadas en la paredes del Alcázar balas perdidas del asedio. 
                                                                                     

En octubre de 1.998 se convirtió en la sede de la Biblioteca de Castilla-La Mancha y a partir de julio de 2.010 es sede del Museo del Ejercito.

Después de un paseo por los alrededores del Alcázar y de echar un vistazo al río Tajo que por cerca discurre, y comprobar que ahora con motivo de los trasvases es un  pequeño caudal tan solo, había llegado la hora de comer.

Tras este necesario y conveniente rato de descanso seguimos el paseo hasta la Catedral de Santa María llamada también Catedral Primada de España, considerada por algunos como el máximo representante del estilo gótico en España
                                                    

Su construcción, para la que se empleo piedra blanca de Orihuela comenzó en 1.226 bajo el reinado de Fernando III el Santo y las últimas aportaciones góticas se hicieron en el s. XV, 1.493, durante el reinado de los Reyes Católicos, cuando se cerraron las bóvedas de la nave central.
                                                               

Después de este pequeño recorrido vespertino por esta bella e interesante ciudad. volvimos a Madrid en el mismo medio de transporte, el AVE, en que habíamos llegado.

martes, 15 de noviembre de 2016

Bacalao fresco con endibias y salsa de mejillones



El bacalao, tanto salado como fresco admite muchas preparaciones. Hoy os presento una que no dejara de gustar a los amantes de este delicioso pescado

 
Ingredientes

                                                                                   
                                       
3 trozos de bacalao de 180 g cada uno
2 cucharadas soperas de aceite de oliva
300 g de puré de patata

Para las endibias

3 endibias
1 cucharada sopera de mantequilla
3 g de sal fina
20 g de azúcar
1 botella de cerveza pilsen

Para la salsa de mejillones

1 cebolla mediana
30 g de mantequilla
250 ml de vino blanco
150 g de nata
1 cubito de caldo de pescado
21 mejillones
45 g de quisquillas

Elaboración


Cortar las endibias y ponerlas a rehogar con la mantequilla y el azúcar. Cuando empiecen a caramelizar añadir la cerveza y dejar que se evapore por completo. Salar.
                                                                   

Poner los mejillones en una sartén grande y en el fuego hasta que las conchas se abran.
Reservar 3 mejillones con su concha y quitar  las de los demás.
                                                             

Pelar y picar la cebolla, rehogarlas con la mantequilla a fuego lento. Añadir el vino y reducir el volumen a la mitad. Incorporar la nata y el caldo que han dejado los mejillones al abrirse y reducir a la mitad.
                                                               
En el último momento añadir las quisquillas peladas y los mejillones.
                                                                     

Dorar el bacalao en una sartén con el aceite.

Poner el puré de patata en el fondo de un plato. Cubrir con las endibias. Colocar encima el pescado. Bañar con la salsa de mejillones y decorar cada trozo con un mejillón con su concha.
                                                                             

martes, 8 de noviembre de 2016

Salamanca, la Catedral y la Universidad

                                                             

De Zamora viajamos a Salamanca con la intención de visitar a un viejo amigo de mi marido, pero solo pudimos ver a su mujer, ya que el se encontraba ausente.

 Pasamos un agradable rato con I., recordando viejos tiempos y poniéndonos al día sobre familiares y amigos, mientras tomábamos un aperitivo en su casa, y el resto del día lo dedicamos a pasear por esta bella ciudad.

Los orígenes de Salamanca se remontan a 2.700 años de antigüedad, durante la Edad del Hierro, cuando los primitivos pobladores se asentaron en el cerro de San Vicente, a la ribera del río Tormes.

Por allí pasaron diversos pueblos como vacceos, vetones, romanos, visigodos y musulmanes, hasta que recuperado el territorio, donde se asienta Salamanca, para los cristianos, el rey Alfonso VI de León encargo a su yerno y colaborador guerrero y político Raimundo de Borgoña la repoblación de estas extensas tierras.

Salamanca alberga la Universisad, en activo, mas antigua de España fundada en 1.218 por Alfonso IX de León, la primera Universidad creada en Europa según la real cédula concedida por Alfonso X, el Sabio en 1.252 y bula del Papa Alejandro IV de 1.255.

Durante la Edad Media fue una de las mas prestigiosas universidades de Occidente, haciendo popular la frase "Quod natura non dat, Salamantica non praesta",o "Lo que la naturaleza no da Salamanca no presta"

Entre los personajes ilustres relacionados con Salamanca y ligados a la historia universal están Antonio de Nebrija, Cristóbal Colon, Fernando de Rojas, Francisco de Vitoria y la Escuela de Salamanca, Fray Luis de León, Miguel de Unamuno, por citar algunos entre un largo número de personalidades.

Cerca de la casa de nuestros amigos y emplazada en la antigua Puerta de Zamora de la muralla, se encuentra la curiosa iglesia románica redonda de San Marcos.
                                                     

Fue construida entre los finales del s. XI y principios de XII, como parroquia.

Entre los s.s. XVI y XVIII experimento  numerosas edificaciones y añadidos, que fueron eliminados a comienzos del s. XX.

En 1.967, por iniciativa de su párroco, se emprendieron importantes obras de restauración.

Su original planta circular, única en el románico hispano tiene 18 m de diámetro. Posee lineas sencillas y poca ornamentación. La silueta del templo se completa con una espadaña barroca, que se añadió en el s. XVIII.

Después de atravesar la Plaza Mayor encontramos la iglesia románica de San Martín de Tours, en la pequeña plaza del Portillo, que ocupa el solar donde estuvo una ermita dedicada a San Pedro, mandada a edificar por el conde Martín Fernandez, en el barrio de los toresanos, en el contexto de la repoblación de la ciudad.

La iglesia aparece hoy día embutida en edificaciones mas modernas y ha sufrido numerosas restauraciones y modificaciones a lo largo de los siglos.

En la portada románica que da a la Plaza del Portillo, llamada Puerta del Obispo, se puede ver una escultura policromada de San Martín a caballo, partiendo su capa para compartirla con un mendigo.
                                                                 

                                                                         

Seguimos nuestro recorrido pasando al lado de la torre del Aire o Palacio de los Fermoselle, en la Plaza de Santa Eulalia.
                                                                       

el palacio perteneció a la familia Fermoselle de la cual lleva el nombre, pasando posteriormente a ser propiedad del Barón de las Cuatro Torres, el cual hizo que  se llamara Palacio de la Torre del Aire o de las Cuatro Torres, como ahora es mas conocido.

Fue mandado a construir por los señores de Santa María del Campo y Fermoselle, en 1.440, como fortaleza en el curso de las luchas entre nobles que se produjeron en el s, XV, perteneciendo el Torreón del Aire al Bando de Santo Tomé, de ahí su aspecto de solidez y los vanos que presenta.

Uno de los aspectos destacables son sus ventanas, algunas con tracerías góticas, y todas diferentes, grandes, pequeñas, cuadradas, con arcos, con balcón, impresionante y curioso.

La Torre del Aire es la única que permanece en pie de toda la fortaleza; a lo largo de los siglos ha tenido diversos destinos; en el s. XVIII fue una fabrica textil, donde trabajaban los que no tenían otro trabajo, ya que a imitación del mundo anglosajón se consideraba una falta no trabajar.

Mas tarde sirvió como obra de caridad, luego perteneció a la Orden de los Hijos de María Inmaculada, y hoy día es una residencia femenina de estudiantes.

Nuestro paseo nos condujo por las calles de Salamanca, todas con magníficos edificios, cargados de historia, como el Real Colegio del Espíritu Santo, de la Compañía de Jesús, mas conocido como la Clerecía.

Este impresionante edificio fue mandado a construir por la reina Margarita de Austria, esposa de Felipe III. aunque no se comenzo a edificar hasta seis años después de su muerte.

Su primer arquitecto fue Juan Gomez de Mora, pero como se tardaron 150 años en concluir las obras, muchos otros dejaron sus huella en el edificio.

Fue colegio y residencia de jesuitas durante un siglo, hasta la expulsión de la Compañía de Jesús, en 1.767.
                                                                       

Enfrente de la Clerecia se halla uno de los palacios mas conocidos y apreciados de Salamanca, por su originalidad, la Casa de las Conchas
                                                             

Este palacio urbano se empezo a construir en 1.493, por encargo de don Ricardo Maldonado de Talavera, ctedratico de Derecho de la Universadad de Salamanca, y rector de la misma; miembro del Consejo Real de Castilla, columna vertebral del gobierno real durante los siglos del s. XVI al XIX. Se concluyo su edificacion en 1.512, por su hijo.

Continuamos luego por la calle la Rua que va hasta la catedral, pasando primero por el Palacio de Anaya, que está enfrente de la Catedral Nueva
                                                                                   
                                                                                   
El Palacio de Anaya o Colegio Mayor de San Bartolome, es un edificio neoclásico levantado en 1.760, donde anteriormente hubo otro, fundado por don Diego de Anaya y Maldonado, en 1.411 para acoger estudiantes que recibieran una enseñanza selectiva, menos masificada que la de la Universidad de la época. Actualmente es la Facultad de Filología de la Universidad de Salamanca. Al lado se encuentra la Hospedería, construida por Joaquín de Churrigera, que fue hogar de estudiantes y hoy forma parte de la Facultad.

En la esplendida fachada destacan las cuatro columnas jónicas, el frontón triangular y la escalinata

Ya teníamos delante la Catedral Nueva


Para ser precisos hay que decir que Salamanca tiene dos catedrales, la Catedral Vieja y la Catedral Nueva, que están adosadas por un muro.

Empezaremos por hablar, cronológicamente, de la Catedral Vieja, aunque esta vez nos detuvimos mas en la Nueva, que la precede.

La Catedral Vieja de Salamanca o Catedral de Santa María de la Sede, fue fundada por el obispo Jerónimo de Perigord y construida entre los s.s. XII a XV, en estilo románico, cuando este estaba dando paso al gótico.

Su elemento mas destacable y lo casi lo único que se ve de ella desde fuera, es el cimborrio, llamada Torre del Gallo, que se eleva sobre el crucero apoyado en cuatro impresionantes pechinas
                                                   

Estuvo a punto de ser demolida cuando se pensó en levantar la Catedral Nueva, pero por fortuna, en este caso no se ejecuto ese horrible designio, principalmente por las necesidades del culto durante los siglos que se tardo en edificarse la catedral Nueva.

Dado el carácter fronterizo de Salamanca durante los largos siglos de la Reconquista, fue proyectada también como fortaleza, por lo que se la conoció popularmente como fortis salmantina, utilidad defensiva que no se puede percibir hoy día.
                                                                 

Pasemos ahora a hablar un poco de la catedral nueva.
                                                                 

La catedral de Salamanca es un organismo complejo, compuesto por un conjunto de edificios, unidos entre si por por dos templos, la Catedral Vieja, de los s.s. XII-XIII y la Catedral Nueva de los s.s. XVI-XVIII.

El proyecto de construir una nueva catedral surgio en el s. XV a consecuenvcia del aumento demografico de la ciudad, debido principalmente a la importancia que había adquirido su Universisad, para lo cual contaron con el apoyo de Fernando el Catolico, queen 1.509 mando a los arquitectos que habian trabajado en las catedrales de Toledo y Sevilla, Antón Egas y Alonso Rodriguez que fueran a Salamanca para tomar traza de un nuevo templo.

La catedral se proyecto en estilo gótico y utilizando piedra de Villamayor, localidad próxima a Salamanca, piedra arenisca de facil manipulación, color amarillo pálido, que  adquiere un color entre rosado y dorado caracteristico con el tiempo.

En este paseo solo nos fijamos en el exterior de la catedral, en el que cabe destacar





martes, 1 de noviembre de 2016

Bizcocho "Old Virginia" con yogur y helado

                                                               
                             
Este bizcocho es bonito sabroso y delicioso, y aun mas con el acompañamiento del yogut griego y del helado de vinilla, y nada dificil de hacer

Ingredientes

                                                           

450 g de harina
1 pizca de sal
1 cucharadita de nuez moscada
300 g de mantequilla
300 g de azúcar
3 huevos
ralladura de 1 limón
50 ml de brandy
200 g de yogur griego con azúcar de caña
helado de vainilla


Elaboración

Tamizar la harina con la nuez moscada y la sal.
                                                 

Montar los huevos con el azúcar hasta que quede bien esponjoso
                                                                         

Añadir poco a poco la mantequilla derretida, mezclando bien.
Incorporra la ralladura de limón y el brandy
Añadir poco a poco la harina tamizada, con cuidado que el batido de huevos y azúcar no baje mucho
Precalentar el horno 10 minutos y hornear de 35 a 40 minutos a 170ºC.


                                                                   
Sacar del horno , dejar reposar 10 minutos y desmoldar.


Es mejor servirlo al día siguiente de haberlo hecho.
                                                                                 

Servir cada plato con una cucharada de yogur y una bola de helado de vainilla