
Que conste que toda la isla es espectacular; es increíble la variedad de paisajes que pueden encontrarse en un territorio tan pequeño, parece hecha para ir de asombro en asombro...
He puesto el mapa de la isla, para que se vea como es este accidente geográfico, tomado desde el aire.

La Caldera es un inmenso cráter en forma de herradura, abierto solamente por el Barranco de las Angustias, que desemboca en el Puerto de Tazacorte.
Es uno de los mayores cráteres del mundo, en su genero; tiene un diámetro de 10 km, un perímetro de 28 km, mientras que las empinadas paredes que lo circundan llegan a mas de 2.000 m., el mas alto el Roque de los Muchachos, con 2.426 m de altura.

Además del extraordinario paisaje, otra de sus características, única en el Archipiélago, es que en sus profundidades, nacen y discurren dos corrientes de agua que confluyen en el río llamado Dos Aguas, desde donde se canalizan para el consumo humano y el regadío.
Tiene también numerosas fuentes, que al unirse forman caprichosas cascadas, dando una nota de contraste en un paisaje volcánico.
Fue declarado Parque Nacional en 1.954, uno de los primeros en tener está consideración, y Reserva Mundial de la Biosfera en 2.002.

Es un panorama tan poco usual, que hasta que no se ve , casi que no puede hacerse uno idea.
Muy interesante tiene que ser hacer senderismo dentro de la caldera, pero en esta ocasión no íbamos preparados para ello, así que nuestra excursión fue mas turística y convencional que deportiva. Esa actividad será para otra visita.
Subimos, pues, hasta el Roque de los Muchachos, y allí recorrimos unos 200 m, hasta lo que hubiera tenido que ser un mirador, pero oh! estaba en obras..., como sucede tantas veces con los monumentos humanos, o en este caso, naturales. Por lo tanto no podíamos tener una visión del conjunto.

Y para poner otra nota de color una humilde flor amarilla; no si endémica o no.



Mientras subíamos pudimos admirar en una cresta, todos alineados, los diferentes telescopios instalados en el Observatorio del Roque de los Muchachos.

El IAC es un consorcio público en el que participan distintas instituciones españolas y de otros diecinueve países, con el objetivo de aprovechar la extraordinaria calidad del cielo de las islas, gracias a su transparencia, para la observación astronómica.
El Observatorio del Roque de los Muchachos, al estar a mas de 2.400 m de altitud, no se ve afectado por el mar de nubes, fenómeno característico en todas las islas. Por encima del mar de nubes la atmósfera es muy limpia y poco turbulenta, condiciones óptimas para la observación.
En esta zona se encuentra la mayor concentración de telescopios del hemisferio norte del planeta, con telescopios solares y telescopios nocturnos, entre los que destaca el mayor telescopio óptico del mundo, el Gran Telescopio de Canarias, GTC o GRANTECAN.

Es curioso ver todos estos enormes aparatos "adornando" los alrededores de la Caldera.
Después de saciarnos con todo este panorama, bajamos de las empinadas cumbres hasta Santa Cruz para comer y pasar la tarde, ya que nuestro avión de regreso salia a las 8.
Antes de llegar a la capital de la isla paramos en el cercano Santuario de Nuestra Señora de las Nieves, patrona de La Palma, por la que los palmeros sienten gran devoción.

Pero no hay solo tesoros naturales alrededor, en el interior se puede admirar, además de la venerada imagen de la Virgen de las Nieves, muchas piezas de gran valor artístico.
La imagen de La Virgen, del s. XIV, es una pequeña talla de terracota policromada, vestida con ricas telas y adornada con joyas, que pueden cambiar según el día o la celebración.
Es la mas antigua imagen mariana de las islas, que ya fue venerada por los primitivos pobladores de la isla, los auaritas o benehoritas.
También son de destacar, en el interior, el altar mayor, enteramente de plata, tallas flamencas del s. XVI, lamparas de cristal y las joyas de la Virgen.


Hoy día la fecha es el primer domingo del mes de julio, aunque a lo largo del tiempo el mes de la celebración ha variado.
2.010 fue año lustral y hubo bajada de la Virgen, todavía quedaban los carteles anunciadores del evento durante nuestra visita.

Era la hora de comer; aunque el cielo estaba casi nublado, hacia calor. Elegimos una de las terrazas, con encanto, para tomar algo, en la Placeta de Borrero, donde había varias para elegir.

Teniamos el coche en uno de los aparcamientos que hay en la Avenida Marítima, que facilitan grandemente el estacionamiento.

Seguimos hasta el Museo Naval, instalado desde 1.940; sus fondos cuentan con maquetas de algunos barcos construidos en La Palma, documentos del Juzgado de Indias y cartas marinas del s. XVIII, en pergamino, de incalculable valor, además de la reproducción de la carabela Santa María, con la que Colón llego a América en 1.492.

- Museo Insular
- Biblioteca José Pérez Vidal
- Archivo General de La Plama


Seguramente lo mas interesante de este Espacio Cultural sea la arquitectura del antiguo convento; en primer lugar se entra al hermoso y austero gran claustro, del s. XVIII.
Hay otro claustro pequeño, muy bonito, del s. XVI, donde crecen los naranjos plantados por los reyes y jefes de estado europeos, en 1.985, con motivo de la inauguración del Observatorio Astronómico del Roque de los Muchachos.
El Museo está localizado en el piso superior, o galería.
Entre otras curiosidades hay una sala dedicada al escritor de novelas radiofónicas Guillermo Sautier Casaseca,

nacido en Santa Cruz de La Palma en 1.910, autor de novelas radiadas, que fueron muy populares en los años 50, 60 y 70 del siglo pasado, como Lo que nunca muere, Ama Rosa, Simplemente María, Las dos hermanas etc., que hicieron derramar muchas lágrimas, en su momento.
También escribió teatro y fue guionista de cine.
El Museo consta de varias secciones: arqueología, etnología, ciencias naturales, arte, náutica, donde se pueden encontrar algunos cuadros flamencos interesantes, y otras cosas de interés.

Ya solo nos quedaba despedirnos de la Isla Bonita, haciendo el propósito de volver, para disfrutar de sus encantos, y acabar de conocer los rincones que aun nos quedaban por descubrir.