El río Deva, que nace en Fuente Dé, transcurre por Asturias y Cantabria, durante 65 km, donde establece el limite entre las dos provincias, como se puede ver en Unquera, por donde pasa, que tiene en la otra margen del rio a la poblacion asturiana de Busdongo, desembocando un poco mas adelante en el mar Cantabrico, formando la ría de Tinamayor.
El toponimo Deva, segun el filologo y escritor asturiano José Luis García Arias (!.945), parece tener un origen prerromano, probablemente celta, y se refiere a una divinidad asociada con el agua
El río Cares es su mayor afluente, tanto el Deva como el cares son dos ríos salmoneros, de gran atractivo para los pescadores.
Bien pues en este popular río ibamos a tener la divertida experiencia de bajar 7 km en canoa.
Vestidos con bañador, sandalias de agua y chaleco nos reunimos en un vado del río para recibir unas someras indicaciones de como manejar la canoa, todas ellas para dos personas, y los remos.
En teoría el que va marcando la dirección es el que va delante, el otro se limita a remar. Hay que saber que la corriente del rí´0 ayuda a la canoa a descender gran parte del recorrido, sin apenas esfuerzo, ya que el recorrido presenta poca dificultad. Lo mas importante es la direccion y no irse contra la orilla en cuyo caso la canoa queda varada.
Una vez recibidas las instruccione,s nos fuimos montando en las canoas .
y empezo la aventura
La comida fue en nuestra base Unquera, en el restaurante Casa Samuel, donde teniamos la cena todas las noche, y en este caso tambien la comida, casera, rica y abundante
Por la tarde visitamos varias playas de Llanes, en concreto dos de las muchas que hay en este concejo asturiano; comenzamos por un paseo por los acantilados,
con una magnifica vista del mar Cantabrico, para seguir en el bus hasta la playa de Cuevas de Mar.
La playa de Cuevas de Mar se encuentra en la desembocadura del rio Nueva, muy cercano al pueblo de Nueva de Llanes y debido a su singularidad, está integrada en el Paisaje Protegido de la Costa Oriental de Aturias.
Las enormes rocas en forma de grutas que hacen famosa esta playa llegan a alcanzar los 7 m de altura. El mejor momento para disfrutar de este espectaculo es la bajamar, que por suerte coincidio con nuestra visita y pudimos disfrutar completamente.
Este espectacular paisaje esta acompañado de aguas cristalinas donde, cerca de las rocas, es posible bucear.
Se trata de una pequeña playa de mar, situada tierra adentro, entre verdes prados.
En una costa de acantilados de roca caliza, el mar fue creando una cueva hacia el interior cuyo fondo se hundóo, fenómeno kárstico conocido como dolina, dejando un pequeño hueco circular de aproximadamente 50 m de diametro, y a unos 100 m de la costa, por el que entra el agua del mar, así como las mareas, y que forma esta pequeña y delicada joya natural, playa de fina arena blanca, y bien protegida del viento.
La profundidad y el tamaño de la playita no permiten otra cosa que el baño tumbados, tal como si fuera una bañera natural, abierta en medio de las verdes praderas asturianas.
Desde lo alto contemplamos esta maravilla natural e incluso algunos bajaron a remojase los pies.
Un día muy interesante y variado.
