martes, 23 de febrero de 2010

Intermedio

He visto que la cocina y las recetas de cada cual interesan mucho a los internautas; a mi también.

Hago largos recorridos por toda clase de delicias, hasta que me siento virtualmente ahita.

Así que he pensado en, entre viaje y viaje, poner unas cuantas recetas, ilustradas con fotos, después de su confección, de las que me han servido para alimentar a mi familia a lo largo de los años.

Están sacadas de aquí y de allí. Libros de cocina, revistas, un extenso curso de cocina que hice hace años con una extraordinaria cocinera francesa, recetas de amistades que me las han cedido y enseñado, recetas de mi madre, etc...

No siempre las recetas están bien explicadas en los libros y demas.

Quizás fueron elaboradas en el pasado con fogones distintos de los que usamos ahora.

Quizás los alimentos estaban menos cuidados y estandarizados en estos tiempos.

Quizás no fueron revisadas convenientemente, y los errores se deslizaron en ellas.

El hecho de haber cocinado durante años, es decir, la experiencia, sirve para subsanar esos errores.

En fin, trataré de que no suceda nada de esto y de que las recetas estén bien explicadas y la elaboración no se separe en nada de ellas.

Nos vemos... en la cocina

miércoles, 17 de febrero de 2010

Capítulo XII Último día de navegación

Habíamos llegado a nuestro último día de crucero. Después de embarcar en Boston teníamos dos noches y un día, un largo camino marino, para llegar a nuestro punto de desembarque en New Jersey. Parecía largo, y lo fue.

Después del desayuno hice una hora de paseo. El día no era esplendido, pero se podía caminar sin mojarse y sin ser arrastrado por el viento.

Otro rato transcurrió en la red, mientras C. estaba en la "biblioteca", pequeña salita adecuada para ese fin, leyendo no un libro de la misma, sino uno suyo.

Me temo que dicha biblioteca estaba surtida con los pocos volúmenes que los pasajeros van dejando al azar; o los olvidan, o quieren desprenderse de ellos.

No hay revistas de actualidad económica o social, o de cualquier otro tema; en resumen allí no hay nada interesante.

También, este día, había los consabidos entretenimientos, pero hace mucho que no tengo edad de guardería, y tampoco me servían.

A la hora de la comida

vimos que un cocinero, con mucho arte, hacia figuras tallando melones y otras frutas; había gran expectación contemplando sus habilidades; mientras comíamos acabo de hacer todas las figuras y yo pude hacer unas cuantas fotos de su obra, ya sin cola.

Uno de los atractivos del día, antes de cenar era una copa que ofrecía a nuestro grupo la agencia que había organizado el viaje.

En primer lugar, nuestro "embajador internacional", el morenito colombiano que ya nos había recibido el primer día, nos dirigió un saludo de despedida, y nos anunció, con gran entusiasmo que la compañía de nuestro crucero iba a poner en el mar, próximamente, un buque de ensueño, en el que cabrían mas de 5.000 pasajeros.

Un angel (helado) paso por encima de nuestras cabezas.

Creo que el sentir general era que ir con mas de 3.000 personas en la "pajarera dorada" era ya suficienteeeee...

Tuvimos una sorpresa interesante pues antes de la copa, se nos ofreció un concierto de guitarra a cargo de uno de nuestros compañeros, M.

Este maestro, de nacionalidad mejicana era un hombre agradable, de maneras muy educadas, que resulto un gran concertista, acostumbrado a giras mundiales.

Su guitarra, según me contó, la había mandado hacer en España, en Granada, donde son especialistas en ese arte.

Interpreto con mucho gusto, varias piezas clásicas.

En la cena el cocinero se esforzó, y esfuerzo había que hacer para dar de comer a tanta gente al mismo tiempo, y que saliera bien. El menú fue bueno. Tuvimos ocasión de tomar otra vez langosta, abundante en esos mares que habíamos recorrido.

Cenamos y charlamos por última vez con los compañeros que el azar nos había asignado durante los diez días de crucero.

Nos despedimos de los camareros que nos habían atendido durante las cenas: el principal R., rumano, y su ayudante O., panameña, los dos muy eficaces.

Despues de la cena nos fue anunciado un desfile temático; se había escogido como motivo decorativo los mares del Sur. La Promenade estaba adornada con articulos étnicos.

Los chicos que habíamos visto, días antes, patinando diestramente, se habían disfrazado de hawaianos y tahitianos, como si del carnaval se tratase y al son de una música a todo decibelio marcharon por el paseo central; hubo, incluso humo, pero no se atrevieron con fuego artificiales.

Teníamos que volver al camarote, ya que esa noche, con hora fijada a las 10 p.m. recogerían las maletas.

Al día siguiente estaba amaneciendo cuando llegamos al muelle, ya conocido.

Largas filas de futuros pasajeros llenaban el hangar de los controles, para hacer el "maravilloso viaje exclusivo".

Se veía entre la bruma de esa hora el "skyline" de los rascacielos de Nueva York, el puente Verrazzano, el puente de Bbrooklyn en la lejanía y más cerca la estatua de la Libertad.

Nosotros tambien eramos libres y estabamos en tierra firme.

Con el deseo de haberos entretenido algun ratito, os saludo y digo adios... hasta el próximo viaje.

sábado, 13 de febrero de 2010

Capítulo XI Cocina de Nueva Inglaterra II


Hemos llegado, casi, al final del viaje. Como me gusta cocinar, he buscado algunas recetas de la cocina de Nueva Inglaterra. No es fácil, pues los platos originales de la zona son pocos y ya hemos visto los tres mas importantes, el clam showder o sopa de almejas, la langosta y los postres con arándanos.

En Plymouth, la primera colonia, fundada por los padres peregrinos, según la leyenda, comieron con los nativos pavo asado.

Este ave es de origen americano, y reconozco que sirve para una buena celebración. Pero... ya no estamos en Navidad; es difícil de conseguir fuera de esas fechas.


Por otro lado en Europa no se celebra el Día de Acción de Gracias y tampoco estamos en esa época.

Por lo tanto he hecho otro menú, que me ha parecido posible en esas latitudes.

  • Ensalada Boston
  • Bacalao a la sidra
  • Tarta de calabaza
Ensalada Boston

para 4 personas

Ingredientes:
  1. 3 patatas medianas
  2. 100 g de tallo de apio
  3. 100 g de cebolla
  4. 50 g de nata de cocinar
  5. 100 g. de mayonesa
  6. 1 pizca de mostaza en polvo
  7. sal y pimienta al gusto
Elaboración

Cocer las patatas sin pelar en abundante agua fría durante 1/2 hora.
Cuando estén frías pelarlas y cortarlas en cuadritos. Reservar
Corta el tallo de apio en trocitos
Cortar la cebolla en trozos no demasiado grandes.
Hacer una mezcla con la mayonesa, la nata, la mostaza la sal y la pimienta de manera que quede fluida.
Añadir a las patatas, apio y cebolla inmediatamente antes de servir.


La mayonesa la hago siempre yo misma. Si alguien está interesado en como se hace me puede, que me pregunte vía e-mail

Bacalao a la sidra

Para 4 personas

Ingredientes

  1. 500 g de bacalao fresco en filetes
  2. 350 g de tomates
  3. 100 g de champiñones
  4. 300 ml de sidra seca
  5. 25 g de mantequilla
  6. 25 g de harina
  7. 75 g de queso parmesano rallado
  8. Sal y pimienta
Elaboración

Se calienta el horno a 190º, mientras se prepara el plato
Se pelan y se cortan los tomates por la mitad.
Se cortan los champiñones en laminas.
Se divide el bacalao en cuatro porciones.
En una fuente engrasada se pone el bacalao.
Se cubre con los tomates y con los champiñones
Se añade la sidra y se pone al horno durante 15 minutos
Se escurre el liquido que haya soltado, reservandolo.
Se tapa la bandeja con el pescado manteniéndola caliente
En un cazo se funde la mantequilla a fuego lento, se añade la harina, se remueve durante 2 minutos, se retira del fuego y se la añade el liquido de la bandeja removiendo.
Se vuelve a poner en el fuego y se deja cocer lentamente removiendo otros 2 minutos.
Se vierte la salsa sobre el pescado.
Se espolvorea con el queso y se pone al grill del horno durante cinco minutos, hasta que este dorado.


Tarta de calabaza

Hacer el fondo de tarta para forrar un molde de 25 cm.
Ingredientes
  1. 1 yema de huevo
  2. 200 g de harina
  3. 80 g de mantequilla
  4. 1 cucharada de aceite
  5. 1 vaso, de los de vino, más o menos de agua fría
  6. 1 cucharadita de café de azúcar
  7. mantequilla para untar el molde
  8. Un pellizco de sal
Elaboración

Poner la harina en un bol.
Espolvorear con la sal, añadir el azúcar, la mantequilla blanda en trocitos y la yema.
Triturar esta mezcla con la punta de los dedos hasta obtener una especie de serrín grueso.
Añadir el agua poco a poco mezclando
Espolvorear con harina la mesa , echar la masa y amasar un poco, formando una bola
Dejar reposar unas tres horas.
Al cabo de este tiempo, espolvorear una superficie con harina.
Poner la bola de masa y extender con el rodillo.
Colocar en el molde untado de mantequilla, recortar la masa sobrante.
Pinchar con un tenedor para que no abombe.
Poner 15 minutos a cocer en el horno antes de rellenar.

Para el relleno
Ingredientes
  1. 2 huevos grandes
  2. 100 g de azúcar
  3. 1 cucharada sopera de azúcar moreno
  4. 1/4 de cucharada de té de jenjibre
  5. 1/2 cucharada de té de nuez moscada
  6. 1 cucharada de té de canela
  7. 1 pellizco de clavo molido
  8. 1/2 cucharada de té de sal
  9. 450 g de calabaza estofada
  10. 375 ml de leche
  11. 275 ml de nata montada
Elaboración

Calentar el horno a 200º C.
Combinar todos los elementos y mezclar bien, se puede emplear la batidora eléctrica.
Echar en el molde preparado.
Hornear durante 40 minutos, o hasta que este cuajada.
Servir templada o fría, con o sin nata montada, al gusto


¡Qué aproveche!

martes, 9 de febrero de 2010

Capítulo X Boston, Massachusetts

Al día siguiente nos levantamos a las 6 de la mañana, después de una noche "toledana", debida en parte a la tormenta, con el consiguiente desvelo.

Madrugón inútil, porque debido a las condiciones climáticas, llegamos con retraso al puerto de Boston; y no solo nosotros, sino los oficiales de emigración de E.E.U.U., que debían controlar, de nuevo, nuestros pasaportes.

En Europa, ahora, estamos mal acostumbrados, pues sin que nadie nos pregunte nada pasamos por pasos y fronteras sin darnos cuenta siquiera.

En E.E.U.U están muy sensibilizados con el tráfico de personas y, aunque hacia solo tres días que habíamos pasado a Canadá, el protocolo era igual que a la entrada por primera vez.

Bien, pues en la gran sala donde cenábamos se montaron unas mesas y se formo una enorme cola de todos los que no eran del país. Aunque casi no se les veía entre los mas de 3.000 pasajeros, eran unos cuantos. Tardamos mas de media hora en pasar.

Bien, pues ya estábamos en Boston.

Y nos esperaba un día denso de conocimientos y visitas. Esta escala hubiera merecido mucho más tiempo del que tuvimos.

Pero... ya sabemos que durante un crucero hay que atenerse a los planes del capitán...

Boston es la capital del Estado de Massachussets, una de las ciudades mas antiguas de E.E.UU. Es considerada el centro económico y cultural del estado, e incluso de Nueva Inglaterra.

Importante puerto marítimo y manufacturero, su rica historia y sus monumentos representativos atraen gran número de turistas al año; es sede de varias primicias en materia de Educación, como La Escuela Latina de Boston, primera escuela pública de E.E.U.U. y tiene la primera universidad del país, Harvard, en la localidad anexa de Cambridge.

La enseñanza superior incluye áreas donde tiene un altísimo nivel, como Medicina, Economía, Finanzas, Ingeniería, Tecnología, Electrónica .

Esa zona de la costa atlántica fue explorada por primera vez por los españoles, liderados por Pedro Menendez de Aviles, desde Florida, hacia 1.565, después por el francés Samuel de Champlain; pero no fue hasta 1.620 cuando se fundo la primera colonia, en Plymouth, de soberanía británica.

El nombre del estado de Massachussets proviene de una de las tribus algonquinas que poblaban el territorio; se puede traducir como "cerca de la colina grande" y algún nombre más, siempre relacionado con montañas.

Fue en Plymouth, que ellos fundaron, donde desembarcaron los peregrinos, llegados a bordo del barco "Mayflower", según la leyenda, huyendo de las restricciones religiosas a que estaban sometidos en Gran Bretaña, para poder practicar su puritanismo sin trabas.

En un principio cohabitaron pacíficamente con los nativos, que los ayudaron, proporcionándoles comida y otros elementos necesarios para la supervivencia. Esta coexistencia duro alrededor de 50 años.

De la coexistencia de indios y peregrinos viene la fiesta mas importante en E.E.U.U., el Día de Acción de Gracias, que la conmemora; aunque el presidente Washington la cambio de lugar en el calendario, ya que la primera comida de los peregrinos y los nativos se celebro en verano.

Esta primera colonia fracaso y murieron casi todos los habitantes de la misma.

Diez años más tarde llegaron otros puritanos, que se establecieron en la bahía de Boston y fueron expulsando a los nativos que quedaban, que ya habían sido diezmados por las epidemias de viruela y de gripe, traídas consigo por los europeos.

Curiosamente, estos segundos puritanos se mostraron intransigentes en materia de religión, olvidando las persecuciones que ellos mismos habían sufrido en la metrópolis. Su fanatismo los llevo a quemar en la hoguera a gran cantidad de inocentes, dando lugar a episodios como el de las brujas de Salem, localidad cercana a Boston. Tuvieron que intervenir las autoridades británicas para parar las ejecuciones y las hogueras.

El ambiente de esa época está muy bien reflejado por el escritor norteamericano Nathaniel Hawthorne en su novela "La letra escarlata".

Poco mas de un siglo después, se produjo en Boston el chispazo que dio origen a la Independencia de E.E.UU., con el episodio llamado, con fines propagandisticos por Samuel Adams, "La Masacre de Boston", ya que en dicha masacre no murieron mas que cinco individuos.

Samuel Adams, uno de los padres de la Independencia Americana, fue también el inspirador del Motín del Té, que fue el comienzo de las hostilidades que condujeron a la Independencia de E.E.U.U.

De las trece colonias que dieron origen al nuevo país, E.E.U.U., Massachussets era la fundada en segundo lugar, y su capital Boston la tercera en cuanto a población.

Después de diversos acontecimientos y batallas, entre 1.775 y 1.783, la Independencia de E.E.U.U. fue reconocida por el Tratado de París o Paz de Versalles.

De ese pasado Boston conserva algunos edificios, como la Old State House situada en el lugar de la Masacre de Boston, nombrado edificio histórico, desde cuyo balcón fue declarada la Independencia de E.E.U.U., entre otros.

Una vez situados históricamente, volvamos a nuestra excursión.

Boston es una bonita ciudad de poco mas de 600.000 habitantes, aunque incluidos los alrededores, el Gran Boston, tiene cerca de 8.000.000.

Tiene un aspecto bastante europeo, sobre todo inglés, con muchos toques americanos; así se combinan los barrios victorianos con los brillantes rascacielos que dominan la ciudad; los monumentos de los s. XIX y XX, con enormes edificios de cristal.

Llegamos en el bus al Boston Public Gardens, precioso parque, donde está la estatua ecuestre de G. Washignton. Lo atravesamos, no se puede decir que paseando, mas bien en lo que podríamos llamar marcha turística, cuando bien hubiera merecido un largo paseo. El día era esplendido en cuanto a temperatura y sol.

Otra vez montamos al bus, para hacer una parada técnica en un Centro Comercial, en una de las avenidas principales. En la calle estaban preparando un mercadillo de frutas, verduras y flores que estuvimos contemplando; como vereis, un regalo para la vista, con esos colores tan sorprendentes. También preparaban ya, con un mes de anticipación, Halloween, con sus calabazas.

Luego nos dejaron un ratito en Copley Square, uno de los muchos lugares de la ciudad donde se confunden arquitectonicamente los edificios inspirados en el arte europeo, con los modernísimos rascacielos .

En un lado de la plaza está la Trinity Church, de confesión episcopaliana, en estilo neo románico, muy en boga en los años de su construcción, último tercio del s. XIX, iglesia que se refleja en los espejos del impresionante rascacielos, la Hancock Tower.

Enfrente está la Biblioteca Pública, de estilo clásico.

También enfrente hay otra enorme iglesia, en estilo neogótico, la Old South Church, unionista o congregacionista.

Boston está lleno de iglesias, no se si de todas las confesiones, pero seguramente sí, de todas.

Tuvimos ocasión de ver unas cuantas.

En el suelo de Copley Square está el marcador de la Maraton de Boston, famosa competición en todo E.E.U.U., que comienza en ese punto.

Cuando nos dirigíamos al barrio de Beacon Hill, nuestra siguiente parada, nos detuvimos unos minutos para contemplar la mole de la Iglesia de Cristo Científico; no había oído este nombre nunca, que por cierto no tiene nada que ver con la Iglesia de la Cienciología.

Esta doctrina fue fundada por la sra. Mary Baker Eddy, en el s. XIX, que se curo de una grave caída, leyendo la Biblia y meditando sobre Cristo y la enfermedad.

Dice que la humanidad y el universo son entes espirituales, no materiales. La enfermedad no viene de Dios, es material y por lo tanto falsa. Propone métodos de curación a través de la oración, aunque no prohibe los métodos que aplica la ciencia médica.

Tiene alrededor de un millón de adeptos en el mundo, gente acomodada de edad avanzada, preocupados por su salud.

Rodeando a la iglesia, colocada en un magnifico lugar, se elevan los rascacielos de cristal.

Llegamos a Beacon Hill, uno de los barrios mas exclusivos de Boston, tranquilo y agradable. Allí no hay grandes palacios, ni espectaculares mansiones, pero el confort casi se respira. La adinerada burguesía bostoniana vive allí, como en un magnifico club privado.

Paseamos un rato por algunas de sus calles, tratando de captar su atmósfera.

Seguidamente fuimos a conocer otra iglesia, la católica Nuestra Sra. del Perpetuo Socorro. Nos contó nuestro guía, C., que cuando la hija de Edward Kennedy, Kara A. Kennedy Allen, estaba internada en el Brigham and Women´s Hospital cercano a la iglesia, para ser operada y tratada de cancer de pulmón, el senador iba a recogerse y orar en este templo siempre que venía a visitarla, casi diariamente. Hoy día Kara A. ha superado el cancer.

Fue en esta basílica donde se celebro el funeral oficial del único de los hermanos Kennedy que murió de muerte natural, después de su fallecimiento en agosto de 2.009

Un feligrés bostoniano nos vio visitando su iglesia y se ofreció, con gran simpatía, a contarnos algo acerca de ella, para eso subió a nuestro bus y nos hizo un poco de historia. Hace poco que ha sido restaurada y ahora está impecable. Así son los norteamericanos, muy colaboradores y orgullosos de sus cosas.

Estábamos a un paso del enorme complejo de mas de treinta hospitales, que hacen de Boston uno de los lugares del mundo punteros en la investigación y tratamiento de enfermedades; una auténtica ciudad de hospitales, uno trás otro, tanto edificios asistenciales como centros de investigación. Pasamos despacio en el autobús, mirando, asombrados, a derecha e izquierda.

Sin bajarnos del vehículo pasamos por el puente sobre el río Charles, que une Boston y Cambridge.

Desde el bus, ya en Cambridge, vimos la fachada del MIT, Massachusets Intitute of Technology, una de las instituciones de enseñanza superior mas prestigiosas y famosas del mundo, en Ciencia, Economía y Tecnología. Fundada en 1.861, ha tenido, en otras épocas, tentaciones de fusionarse con la Universidad de Harvard, pero las protestas de profesores y alumnos lo han impedido.

Recibió una gran aportación de "cerebros" europeos después de las Primera y Segunda Guerras Mundiales, y cuenta con numerosos premios Nobel entre sus profesores y antiguos alumnos.

En Cambridge está la Universidad de Harvard.

Esta Universidad, privada, se extiende a lo largo de 1,5 km2.

Pertenece a la Ivy League, que tiene sus propios equipos deportivos, pero no ofrece becas de deporte. La Yvy League esta compuesta por ocho universidades, todas en la costa este de E.E.U.U.

Fue fundada en 1.636, con el nombre de New College o The College at New Towne, cambiado tres años después por el de Harward College, en recuerdo de su benefactor, John Harward.

Este clérigo, natural de Londres, que había estudiado en la Universidad de Cambridge, y emigrado posteriormente a lo que hoy es el Gran Boston, lego la mitad de su patrimonio y su biblioteca a la institución, además del nombre de Cambridge.

En 1.780 se encuentra el nombre de Harvard University por primera vez, en la Constitución de Massachusets.

Posteriormente, el presidente de la institución durante cuarenta años, Charles W. Eliot, tranformo radicalmente el modelo de universidad , convirtiéndola en un centro de investigación moderna, tal como la conocemos hoy, que ha influido en toda la enseñanza superior e incluso secundaria de E.EU.U.

Personajes famosos han estudiado en ella, desde
  • políticos como uno de los Padres de la Patria, John Hancock, como más recientes: John, F. Kennedy, George W. Bush y el actual presidente de E.E.U.U., Barak Obama.  
  • escritores: T. S. Elliot
  • actores: Jack Lemmon, Natalie Portman, Mira Sorvino, Tommy L. Johnes...
  • músicos: Leonard Berstein, etc.
Dimos una vuelta, mas bien rápida, por la parte histórica de Harvard. Una de las bibliotecas, fue donada por la madre de una víctima del hundimiento del Titanic y lleva su nombre.

Vimos la famosa "aguja" blanca , que es como un emblema de Harvard.

Vimos su escudo: "Veritas" en el dintel de la puerta de entrada y otras inscripciones en otros dinteles.

Vimos la estatua del fundador, asediada por las cámaras fotográficas de los visitantes.

En suma, nos pudimos hacer una idea de la importancia de la institución universitaria, aun sin llegar a ver la extensa parte nueva.

Ahora llegaba la hora de comer.

Nos llevaron al Quincy Market, y allí nos dejaron para que nos las arregláramos por nuestra cuenta.

Este mercado, situado en el centro histórico de Boston, cerca del puerto, está al lado de Faneuil Market, que se estableció en primer lugar y que tuvo que ser ampliado con el Quincy Market , diseñado por el arquitecto Alexander Parris y edificado entre 1.824 y 1.826.

Su nombre viene del alcalde Josiah Quincy, gran impulsor de su construcción.

La estructura del Mercado por dentro es interesante; de sus orígenes conserva una rotonda con cúpula y leyenda alrededor, que es bonita.

Es un gran complejo de tiendas, moda, regalos, librerías, etc. y varios pasillos de locales de comida rápida, tan rápida que hay que comerla de pie, o bien sentado en el primer piso provisto de bancos de madera y algunas mesas. La cantidad de gente, entre vecinos de la ciudad haciendo sus compras o paseando, y turistas hace que sea difícil conseguir mesa. Comer este tipo de comida "a mano alzada" es difícil, solo para expertos que hayan practicado mucho.

Ya nos habían dicho que la comida la teníamos que organizar nosotros. Entramos en el pasillo de la restauración, y pedimos lo que podríamos llamar dos perritos calientes, que tenían el calificativo de italianos, con dos raciones de patatas fritas. Las dos cosas eran de lo mas abundante, con una ración nos hubiera bastado para los dos.

Subimos estos "manjares" al piso de arriba y conseguimos un trozo de banco adosado a la pared.

Todavía teníamos una hora y media para visitar un poco mas Boston; como estábamos en el centro histórico, pudimos aprovecharlo, siguiendo un mapa.

En esta parte de la ciudad se confundían, de nuevo, los edificios históricos con los rascacielos, algunos del los años 20 en adelante, del s. XX.

Es un efecto curioso pues los pequeños edificios históricos aparecen como empotrados en los enormes gigantes de cemento y cristal.

Desde el Quincy Market, fuimos andando hasta la Old State House, enfrente del punto donde empezó la Masacre de Boston.

Pasamos por la King´s Chapel, fundada en 1.686, que paso por los avatares de la Revolución Americana y algunos hechos históricos; hoy es de confesión Unitaria. Tiene, en su jardín, un cementerio donde están enterrados personajes eminentes de la historia de Boston y de E.E.U.U.

En la esquina del parque Boston Common, está la Park Street Curh, congregacionista, que tiene muy cerca otro pequeño jardín con cementerio, donde reposan los restos de algunos Padres de la Patria, como Samuel Adams.

Ya habíamos llegado al Parque Boston Commons, el mas antiguo de Boston, que estaba muy animado. El día invitaba a sentarse o tenderse en la hierba. Teníamos tan poco tiempo, que nos limitamos a echarle una ojeada desde la calle.

Pudimos ver el gran edificio del Capitolio de Massachusets, con su cúpula dorada, que ha sido el modelo para los capitolios de los demás estados de la Unión

Cerca del Capitolio hay un monumento en memoria del coronel Robert G. Shaw, que comandó el primer regimiento compuesto totalmente por soldados afroamericanos, durante la guerra Civil Americana, en 1.863. Es un bajorelieve de bronce que data del 1.897.

El tiempo se nos acababa. Teníamos que volver al autobús para entrar a la hora fijada en el barco.

Se iba poniendo el sol mientras nos alejabamos de Boston. Durante bastante rato vimos la linea de edificios recortandose sobre el cielo. Las luces iban encendiendose.

Para acabar os recomiendo la lectura de la novela de Henry James "Las bostonianas", tambien llevada al cine. Refleja el ambiente de Boston, en el s. XIX, y el surgimiento en esta ciudad del movimiento feminista; está magnificamente escrita y es entretenida.

Boston siempre ha sido una ciudad muy adelantada en cuanto a movimientos políticos y sociales.

jueves, 4 de febrero de 2010

Capitulo IX Navegando hacia Boston

Habíamos dejado Canadá. Nos esperaba día y medio de encierro en el barco.
A primera vista parecía largo. A segunda vista, lo fue.

Después del desayuno subimos a la cubierta de paseo, para caminar una hora. No pudimos completarla, ya que se puso a llover al cabo de media hora. Hacia un día horrible, pues a la lluvia le acompañaba un fuerte viento.

A las once de la mañana subimos a la cubierta 14, donde en la pequeña sala 9, había una clase de bridge. Por supuesto en inglés, ya que todos, menos nosotros dos, eran norteamericanos.

La clase verso sobre las contestaciones a la subasta de bridge llamada "Apertura a Sin Triunfo".
La profesora era buena y se esforzaba, pero nos dimos cuenta de que toda aquella gente estaba tomando su primer contacto con el juego de bridge. Por lo tanto no nos servía. Hace años que tuvimos esa clase.

El comportamiento de la gente me sorprendió, pues lo encontré muy similar al de casa. Poca atención y muchas preguntas inadecuadas.

El tiempo fue de malo a peor. Aunque parezca increíble, en nuestro grupo había varias personas que marean siempre que suben a un barco. Se habían provisto de bastantes cajas de pastillas antimareo... que consumieron en su totalidad. Oí decir a una de ellas, a la hora de la cena, que se había tomado cinco pastillas ese día, y aun así seguía mareada. Para no entender que hacían allí.

La explicación, quizás, esté en la fuerte propaganda que se hace sobre los cruceros. Consiste en un bombardeo en los medios de comunicación que podríamos resumir "en el crucero estás en el paraíso".

Mientras, dimos un paseo por La Promenade, pomposo nombre del paseo central, subiendo y bajando a pie, para hacer ejercicio, en vez de usar los preciosos ascensores de mampara transparente, con vistas sobre la misma.

La decoración tiene de todo, desde elementos de dudoso gusto, hasta cuadros muy interesantes, entre otros varias acuarelas, pintadas por Henry Miller, que además de un magnífico escritor, tenía dotes como pintor.

También hay diversas muestras de la fotógrafa de políticos, actores, cantantes, en fin, de la gente importante de este mundo, Ann Levowitz .

Todo esta muy bien acondicionado, con aspecto lujoso.

Use un rato los servicios de Internet, pagaderos con la tarjetita de la que nos habían provisto, conectada con la cuenta corriente. Servicio caro y lento.

Por la noche el tiempo empeoro y hubo gran oleaje y tormenta en el Atlántico. El barco se movía mucho. Pobres mareados

Debido a la tempestad el barco llego con retraso a nuestra siguiente escala: Boston

Dejemos el relato aquí pues Boston ya pertenece a otro día y otro capítulo.

martes, 2 de febrero de 2010

Capítulo VIII Cocina canadiense



Antes de abandonar Canadá virtualmente, me ha parecido oportuno hacer alguna receta de ese país. He encontrado poco plato original, por asi decir. Por supuesto que, en la zona que visitamos, tienen los productos de su extensa costa atlántica, marisco, salmón, bacalao. Todo muy sabroso, pero que no necesita de mucho conocimiento en la cocina para quedar bien.

Un país con tanta emigración del resto del mundo, recibe todas las influencias culinarias. Por otro lado la cocina rápida está totalmente implantada; comen hamburguesas, pizzas, perritos calientes, nachos con diversas salsas, sushi etc., etc.

La cocina cajún, de los acadianos (franceses, primeros colonizadores de esa parte del mundo) también ha dejado su impronta.

Nosotros solo comimos fuera del barco en Lunenburg, pero la comida no tenia nada para ser recordada, ni para repetirla en casa.

He buscado por aquí y por allá y me he decidido por hacer tres platos de implantación en Canadá

  • Ensalada canadiense
  • Cocido irlandés
  • Crepes con plátano y jarabe de arce
Ensalada canadiense

Ingredientes para 6 personas
  1. 1 vaso de agua lleno de arroz redondo
  2. 1 lechuga
  3. 3 o 4 zanahorias medianas
  4. 1 cebolla mediana
  5. 100 g champiñones
  6. aceite de oliva
  7. vinagre
  8. sal y pimienta al gusto
Elaboración

Hervir el arroz en abundante agua con sal hasta el punto deseado.
Colarlo y enjuagarlo con agua fría.
Volcar el arroz en el fondo de una bandeja o ensaladera .
Cortar la lechuga en pequeños trozos y echarla en la bandeja.
Rallar la zanahoria y agregar a lo anterior.
Cortar en aros finos la cebolla,
Cortar los champiñones en laminas y agregarlos a la ensalada.
Aderezar con el aceite, vinagre, sal y pimienta.
Mezclar y servir


Cocido irlandésIngredientes para 6 u 8 personas

  1. 1 k 100 gde cordero deshuesado
  2. 6 patatas medianas
  3. 3 zanahorias medianas
  4. 1 cebolla grande o 2 medianas
  5. 480 ml de agua o bien 240 ml de agua y 240 ml de cerveza guiness
  6. varias ramitas de perejil
  7. sal y pimienta
Elaboración

Cortar la carne en dados.
Cortar las patatas en rebanadas.
Cortar las cebollas en finos aros.
Cortar las zanahorias en redondeles.
Picar el perejil lo mas finamente posible.

En una olla ancha poner todo esto en capas, empezando por una de patatas, luego la carne, las cebollas, las zanahorias y el perejil, de manera que de para dos capas; acabar con una de patatas Añadir el agua o la mezcla de agua y cerveza, si se prefiere, y dejar cocer a fuego muy lento una hora.


Crepes con plátano frito y jarabe e arce

Ingredientes
  • 250 g de harina
  • 2 huevos
  • 1 cucharada de aceite
  • 1 cucharada de ron o coñac
  • 1 cucharada de café de azúcar
  • 1 pizca de sal
  • 1 vaso de leche semidescremada
  • 1 plátano por crepe
  • jarabe de arce
Elaboración

Poner la harina, la sal, el azúcar, el aceite y el licor en un bol.
hacer un hueco en el centro y añadir los huevos enteros.
Mezclar y añadir lentamente, mientras se bate con una cuchara de madera , la lecha
Batir hasta que quede sin ningún grumo.
Dejar reposar un par de horas
En el momento de comer, realizar las crepes, poniendo un poco de mantequilla en un sartén, hay quien unta la sartén con aceite, puesto previamente en un papel de cocina; coger con la garcilla pasta suficiente para cada crepe, echarla en la sartén esparciéndola bien por todos lados.
Dejar que se dore bien por los dos lados; reservar.
Mientras tanto, en una sartén con un poco de aceite, freír los plátanos.
Una vez confeccionadas las crepes, rellenar cada una con un plátano frito, enrollar y cubrir con un chorrito de jarabe de arce


Como bebida tomamos cerveza. Si se quiere ser muy canadiense tomar la Guiness. Si esta resulta algo fuerte, como me parece a mi, sirve cualquier pilsen. Nos tomamos con agrado el menú; os deseo lo mismo si os animeis con alguna receta.
¡Buen apetito!