lunes, 22 de febrero de 2021

Viaje por el norte de Italia. Llegada a Florencia


Hace no mucho tiempo pasamos siete dias en Italia, con un recorrido del centro, noreste y norte, que podemos llamar exhautivo, como se ira viendo a lo largo de varios densos capítulos de mi relato.

Empezamos el viaje en Burgos, ya que el grupo estaba formado por antiguos alumnos y amigos de la Universidad de Burgos, y fue gracias a unos amigos, de siempre, que viven en Burgos, que nos pusieron al tanto del viaje, como lo hicimos.

A la mañana siguiente de nuestra llegada a Burgos, bien pronto, casi de madrugada. nos trasladamos al aeropuerto de Madrid, y de allí, después de casi dos horas de vuelo, llegamos a Florencia, primera parada del viaje.

Desde el aeropuerto nos dirigimos al Mirador de Michelangelo desde el que se tiene una privilegiada vista de Florencia, que disfrutamos un buen rato; era la hora de comer y cada cual tomo lo que es un tentempie.

Antes de discurrir por lo mas emblemático de esta ciudad digamos unas cuantas palabras sobre ella.

Florencia ciudad perteneciente a la región de Toscana, es la ciudad mas poblada de su región, con cerca de 400.000 habitantes y con millón y medio si se considera su área metropolitana.

Fue fundada por los romanos en el 59 a.C. con el nombre de Florentia, donde habitarían veteranos del ejercito, es decir un castro o fortificación; interesado Julio Cesar en  este castro, se diseño  según el modelo romano de ciudad, con las calles cardo y decumano cruzándose en la actual Plaza de la República, y pronto se conivirtio en un importante enclave comercial y tuvo todos los edificios que caracterizan a una ciudad romana, acueducto, foro, termas, teatro y anfiteatro, además de extensos campos de cultivo alrededor. El emperador Diocleciano en el s, III d.C. la declaro capital de la provincia de Tuscia.

Gran parte de las construcciones romanas están sepultadas bajo los edificios de las épocas posteriores, pero poco a poco van saliendo a la luz, debido a las prospecciones arqueologica.

Tras la evangelización, el primer mártir, durante la persecución del emperador Decio (201-251), fue San Miniato, probablemente un peregrino procedente de Grecia o de Siria, que fue decapitado alrededor de 250.

En este lugar se construyo un santuario, al que sucedio una capilla en el s. VIII. La construcción de la actual iglesia comenzó en 1.013 y continuo durante varios siglos; tuvo un monasterio benedictino, que paso a cluniacense, que sigue en nuestros días como una Congregación benedictina Olivetana.

La fachada de la iglesia es una de las obras maestras del románico florentino. La he visto en otras ocasiones aunque no esta vez, pero recomiendo su visita grandemente.                       


Tras la caída del Imperio Romano, paso por las manos de diversos pueblos gemánicos, ostrogodos, con la conquista por parte de Teodorico I, longobardos y francos, con el invasión de Carlomagno que dejo en Florencia un conde, sustituto del derrotado conde longobardo.

Una prueba de la recuperación ciudadana de Florencia en el s. XI fue, precisamente la construcción de la basílica de San Miniato.

Despues de unos convulsos siglos, por las luchas entre las familias de la misma ciudad, y contra o a favor de otros, como del emperador del Sacro Imperio Romano Germánico o el Papa, disputa que durante los s.s. XII y XIII, dividió a la ciudad entre güelfos, defensores del poder del Papa, y gibelinos que apoyados por el emperador germánico se oponían a ese poder.
 
Estas luchas no impidieron que Florencia se convirtira en una de las ciudades mas prósperas y poderosas de Europa, ya que llegaron a acuñar moneda, el florín de oro, en 1.252. que permanecería durante tres siglos como uno de los patrones monetarios del mundo.

El arte florentino se abrió al Renacimiento a principios del s. XV, antes, en varias decádas al principado de los Medicis.

Los Medicis, poderosa e influyente familia, ligados a la historia de Florencia, de modestos orígenes, ya que no procedían de la nobleza feudal, ni de ninguna dinastía, hicieron su fortuna lentamente, sin llamar la atención, en base a los negocios y a su Banca, ya que se convirtieron en banqueros del Papa y de otros altos dirigentes políticos de casi todos los reinos europeos de la época. 

Llego el Cuatrocento, en que las clases populares dominadas por una oligarquía, se aliaron con los Medici, y el primer dirigente político de la familia, Cosme I de Medicis (1.519-1.574), derroto a la oligarqía, iniciando el gobierno de los Medicis,
                                                               

 Los Medicis gobernaron, con alguna interrupción, la política florentina durante 350 años, periodo durante el cual Florencia destaco por su poder económico y por ser el centro de la cultura y del arte.

En 1.737 se extinguió la linea directa de los Medicis, y el gran ducado fue heredado por Francisco de Lorena, esposo de la emperatriz de Austria María Teresa de Habsburgo.

En 1.861, tras un  plebiscito, fue depuesto el último duque de Toscana Fernando IV de Habsburgo-Lorena (1.835-1.908) y la Toscana fue anexionada al recientemnete creado Reino de Italia. Florencia fue la capital del reino durante seis años, desde 1.865 hasta 1,871.

En la Segunda Guerra Mundial fue ocupada por los alemanes (1.943-1.944); esta ocupación tuvo como consecuencia la destrucción de los puentes de Florencia, a excepción del Puente Viejo (Ponte Vecchio) de extraordinadrio valor artístico.

Florencia es conocida por su grandioso patrimonio artístico; aunque con obras notables de todos los siglos anteriores, fue semillero de artistas en el Renacimiento, que sería demasiado largo enumerar, tanto arquitectónicas como plásticas. 

He estado varias veces en Florencia, ciudad a la que cuando se ve una vez se quiere volver tantas veces como se pueda. En esta ocasión, y debido a que era una visita corta, ya que teníamos que llegar a dormir a Bolonia, nos paseamos por el centro, lugar mas visitado y conocido de la ciudad, y solo discurriendo entre sus extraordinarios monumentos.

En primer lugar contorneamos la Catedral obra maestra del arte gótico, Il Duomo de Santa Maria Dei Fiore, en pleno casco antiguo, símbolo de la riqueza y poder de la capital toscana durante los s.s. XIII y XIV, Destaca en ella la grandiosa cúpula, obra de Brunellesqui (1.377-1.476), que fue el que la ideo y consiguió que no se derrumbara, con su extraordinario peso.
                                                                                 

Otro elemento a destacar en la catedral es la torre campanario, el Campanile, trazado por Giotto (1267-1.337) y finalizado a su muerte, en 1.359 por F. Talenti.

La altura de la torre, de mas de 84 m, está recubierto de mármoles policromos, como la catedral y el Baptisterio, y perfectamente integrado en el conjunto. Hay 414 escalones para subir a lo mas alto, pero la subida no resulta demasiado pesada y tiene la recompensa de tener una de las mejores vistas de Florencia.

El Baptisterio dedicado a San Juan Bautista, patrón de la ciudad está enfrente de la Catedral, 
                                                                              

y es el edificio mas antiguo de la plaza, donde se celebraban los bautizos, tiene grandes dimensiones para albergar a la multitud que se reunía allí los días de bautizo.
                                                                   

Fue construido en el s. V, sobre antiguas construcciones romanas. Tuvo la categoría de catedral, consagrada por el Papa Nicolas II (990-1.061) en 1.059.

Son muy importantes las tres puertas de bronce.

 La puerta sur, la mas antigua, debida al escultor Andrea Pisano (1.290-1.348). tiene 28 paneles que representan la vida de San Juan Bautista, entre otros.
                                                                            

 La puerta norte, obra del escultor y orbefre Lorenzo Ghiberti (1.378-1.455) describe en sus 28 paneles la vida de Cristo y de los cuatro evangelistas. 
                                                                              

La puerta tercera, también de Ghiberti, que Miguel Angel llamo "La Puerta del Paraíso", tiene diez paneles que representan episodios del Antiguo Testamento.
                                                                               

Delante de esta última puerta había el habitual  grupo de espectadores, ya que es la mas conocida y apreciada, y con razón, pues siendo todas notables, está es la mas bella.

Seguimos después hasta otra esplendida obra florentina, la Plaza de la Señoría, con sus palacios y estatuas. 


La   Plaza de la Señoría es el centro político y monumental de la ciudad. Su historia se remonta a la época de los romanos y en los siglos posteriores tuvo diversos cambios y distribución. Hubo allí unas termas romanas y luego una iglesia paleocristiana, como han evidenciado las prospecciones arqueológicas, pero fue a partir de 1.268 cuando empezó a tomar el aspecto con la que la vemos hoy día. 

Cuando pasemos por ella estaba llena de gente; también había coches de caballos, que se pueden alquilar, para dar una vuelta sin cansarse.

El edifico mas destacado de la plaza es el Palazzo Vecchio, cuya torre de la Vacca, se distingue desde varios puntos de la ciudad,
                                                                             

El Palacio Viejo se encuentra en esta magnifica Plaza, entre la Plaza del Duomo y el río Arno. 

Hoy día, es el Ayuntamiento de la ciudad, pero sus usos a lo largo de los siglos han sido variados. 

Los orígenes del actual edificio se remontan al s. XIV, cuando los dirigentes florentinos decidieron construir un palacio para albergar los organismos del gobierno de la Republica.

Su realización fue encargada al arquitecto florentino Arnolfo di Cambio (1.240-1.310), que ya había diseñado la catedral  y la iglesia florentina de la Santa Cruz, entre otras muchas obras en Italia. Arnolfo incorporo también la antigua Torre de la Vacca, utilizándola como parte baja de la torre actual, por lo que no es el centro del edificio, al que da su majestuosidad, con sus 94 m de altura.

 El arquitecto, para ahorrar tiempo y dinero también aprovecho los cimientos de las construcciones anteriores; el edifico refleja el estilo austero de las fortificaciones medievales

El Palacio fue construido en el lugar donde estuvo el Teatro romano, y sobre las ruinas del Palacio de Fanti y del Palacio de Justicia, que lo habían precedido.

Cosme I de Medicis. en el s. XVI ordeno su restructuración y decoración para convertirlo en su residencia, que paso a ser el Palacio Ducal.
 
En el exterior, también magnifico, delante de la entrada estuvo copia de la escultura del David de Miguel Ángel, obra maestra del Renacimiento, cuyo original se encuentra ahora en la Galería de la Academia de Florencia.
                                                                                 

Justo enfrente del palacio se encuentra la Loggia dei Lanzi, en otra esquina de la plaza, con estatuas de enorme calidad, que lo convierten en un excepcional museo.
                                                                      
Construida entre 1.376-1.381 por los arquitectos Benci di Cione (1.31-1.388) y Simone di Francesco Talenti (1349-1.388),. su nombre se debe a que en el año 1.527 acamparon en la logia los lansqueneti, soldados de infantería, del emperador Carlos V, en camino hacia Roma.
                                                                                           

En un principio la logia fue utilizada para ceremonias y asambleas, pero en el s. XVI empezó a utilizarse como galería al aire libre de las esculturas de los Medicis, y en efecto fue Cosme I de Medicis quien en el año 1.555 coloco en la logia el Perseo de Benvenuto Cellini (1.530-1.571), considerada la escultura mas importante del pórtico, estatua en bronce que representa al héroe griego, alzando la cabeza que acaba de cortar a la Medusa  
                                                                     

Otra de las obras sobresaliente es el rapto de las Sabinas, escultura en mármol del flamenco Juan de Bolonia, llamado por los italianos Giambologna (1.529-1.608) 
                                                                                     

Otros monumentos de la Plaza de la Señoría  son el Tribunal de las Mercancías, construido en 1.359.
Sobre la fachada en lo alto se encuentran las copias de las veintitres artes, mas el escudo del Tribunal, mientras los originales se conservan en el interior del palacio.
                                                                                              

Otros edificios notables se integran en esta maravillosa y tan variada plaza, como el Palacio Uggucione, construido por el gran duque Giovanni Uggucione en 1.550
                                                            

y otros edificios mas modernos.

Las estatuas de la Plaza son un elemento decorativo de grandísimo nivel. Las mas antiguas son las que están delante del Palacio Viejo, el David de Miguel Angel, el Marzocco, león rampante, símbolo de la ciudad, Hércules venciendo a Caco, etc.; a destacar la gran fuente de Neptuno,
                                                                       


esplendida obra del arquitecto y escultor Bartolome Ammannati (1.511-1.592) y Giambologna escultor flamenco (1.529-1.608) que fue uno de sus aprendices.

Construida en mármol y bronce fue encargada para festejar el matrimonio entre Francisco I de Medicis (1.541-1.587) y la archiduquesa Juana de Austria (1.547-1.578).

La figura de Neptuno, en mármol de Carrara, refleja los rasgos de Cosme I de Medicis, se yergue sobre un pedestal decorado con figuras mitológicas, en el centro de una fuente octogonal.

La fuente ha sufrido numerosos daños a lo largo de los siglos: fue usada como lavadero; sufrió daños y vandalismo  ya en el s. XVI;, fue bombardeada durante la guerra de unificación de Italia, y fue restaurada en 2.005.por lo que tuvimos el placer de verla en su estado original. 

Para acabar este, ya largo, relato citare la estatua ecuestre de Cosme I de Medicis, muy cercana a la Fuente de Neptuno

La estatua fue encargada, en 1.587 a nuestro conocido escultor Giambologna, por Fernando I de Medicis (1.549-1.609) para honrar a su padre Cosme Primer Gran Duque de Toscana, y realmente luce soberbia.

Después de estas dos visitas la Plaza del Duomo y la Plaza de la Señoría, dimos por concluida la visita a Florencia, en esta ocasión, ya que nos esperaban cerca de dos horas de bus, por una carretera escarpada, con muchas vueltas, de manera que llegamos ya de noche.

Dejamos Bolonia para el próximo capítulo.
                                                                                                                                                            

lunes, 15 de febrero de 2021

Pastas de te con almendras ralladas

                                                                                      

Estas ricas pastas, son fáciles y rápidas de hacer y siempre gustan, asi que probad esta sencilla receta.


Ingredientes

75 g de mantequilla
100 g de azúcar
1 huevo
100 g de harina 
100 g de almendras en polvo
Para el adorno: Una almendra o media guin


Elaboración

Tener la mantequilla ablandada, mezclarla con el azúcar y las almendras, la ralladura de limón, la harina tamizada y 1/2  huevo

                                            

                                                                                    

                


                                      

Trabajar todo lo menos posible, solo lo necesario para que los ingredientes queden bien mezclados.

                                      

Coger una parte de la masa con un cucharilla de café y hacer una bolita aplastada: colocar todas las bolitas en una bandeja de horno, despues de barnizarlas con el resto del huevo batido.

Colocar encima de cada bolita una almendra o media guinda y meter a horno a 150ºC durante media hora.

Retirar del horno cuando estén doradas, levantándolas de la bandeja con cuidado                                         




lunes, 8 de febrero de 2021

Santander


Por motivos familiares y otros hemos visitado esta preciosa ciudad, a orillas del mar Cantábrico, varias veces desde hace años, con mal tiempo, viento y lluvia, con un esplendido sol y buena temperatura, así que tratare de resumir bastantes visitas en este capítulo, para tener una idea de lo que ofrece el enclave.

Unas lineas para conocer el entorno, antes de adentrarnos en la ciudad..

Santander se encuentra en el norte de la Península Ibérica, estrategicamente situada entre el mar y la montaña, pues, une a su privilegiada ubicación al nivel del mar, con cotas superiores a los 2.000 m de altitud a solo una hora de coche, favoreciendo lo relacionado con el mar y la alta montaña. 

Tiene mas de 170.000 habitantes que se convierten en cerca de 300.000, considerando la conurbación que se extiende alrededor de la bahía de Santander.

Una de las interpretaciones del origen del nombre de Santander sería la derivación lingüística del nombre latino de Sancti Emeterii, San Emeterio, patrono de la ciudad, desde que en el s. VIII los cristianos del sur de la península, que venían al norte huyendo de la invasión musulmana, trajeron consigo las reliquias de los Santos Emeterio y Celedonio. Otra interpretación, quizás derivada del mismo origen, proviene de mapas del s. XVI, en los que aparece como San Andrés, del que pudo derivar Santander.

Pocas noticias hay de Santander antes de la conquista romana, aunque su emplazamiento invita a pensar que pudo haber en la zona algún tipo de poblamiento, debido a las favorables disposiciones geográficas, al abrigo de su bahía y su abundante agua dulce.

De la época romana son los primeros datos de la ciudad, llamada por ellos Portus Victoriae lulobrigensium, del que hablan fuentes romanas en el 26 a.C. y de la que se conservan algunos restos arquelógicos.

En el s. VIII el rey Alfonso II el Casto de Asturias fundo un monasterio, dedicado a San Emeterio, alrededor del cual se conformo la población, principalmente de gentes de mar.

En 1.187 Alfonso VIII, doto a la villa de fuero para facilitar el tráfico marítimo, la pesca y el comercio.

Durante los s.s. XII y XIII la población vivía en el recinto de sus murallas, donde estaban el castillo y las Atarazanas o astilleros. mandados a construir por el rey, para aprovechar la riqueza forestal del territorio.

En 1.217 se empezó a construir la iglesia principal de la villa, en el mismo lugar donde habían estado los demás templos anteriores, y su edificación dura hasta el día de hoy,

                                           Vista de la ciudad a finales del s. XVI, por el pintor
                                                             flamenco Joris Hoefnagel

En el s. XVI Santander tenia actividad en su puerto con el comercio de la lana, las maderas, vinos y otros bienes que se exportaban a Flandes, y otros lugares de Europa, además de su actividad pesquera.

Tras algunas guerras locales, epidemias, incendios y otros desastres, en el s. XVIII la villa comienzo a recuperarse de estas crisis, que la habían dejado escasa en población, infraestructuras y lazos comerciales.

También el título de ciudad, que le otorgo Fernando VI en 1.755, y el desarrollo del intercambio del norte de la península con los principales puertos americanos, contribuyeron de forma decisiva al crecimiento e importancia de Santander.

Esta recuperación se vio bruscamente interrumpida con la invasión napoleónica, con su secuela, como en toda España, de guerra, destrucción del patrimonio nacional,  desastres, batallas, tanto durante la invasión y ocupación, de los años 1.808 hasta 1.813, como ante la retirada de las tropas francesas, que provocaron baños de sangre y agresiones de todo tipo. Mas de un siglo tardo España en recuperarse. 

En el s. XIX se desarrollo una potente burguesía, que creo industrias auxiliares de la navegación, de harina, azúcar y cerveza, así como los astilleros de San Martín, y que impulso fuertemente el desarrollo urbano de la ciudad.

A mediados del s. XIX se produjo un auge de las estaciones balnearias del norte de España, que promocionaron a Santander por sus playas, e impulsaron la creación del balneario de El Sardinero, frecuentado por la alta sociedad española, convirtiéndose, en el reinado de Alfonso XIII, en el lugar favorito de veraneo de la corte.

                                                                   

Una terrible catástrofe sucedida en 1.893 en la ciudad, fue la explosión, precedida por el incendio del buque Cabo Machichaco,  que estaba cargado con dinamita y ácido sulfúrico, que produjo casi 600 muertos y otros tantos heridos, entre los cuales, la mayor parte de las autoridades civiles y militares de Santander, así como el Gobernador civil, y numerosos bomberos, trabajadores y curiosos que se habían acercado al lugar de los hechos.

Después de un pavoroso incendio en 1.941, que arraso, en dos días, la mayor parte de la puebla medieval, y que dejo a muchas familias sin hogar, la reconstrucción supuso una gran renovación urbana, que cambio la ciudad.


Aunque el crecimiento urbano ha sido bastante desordenado, principalmente durante el periodo 1.950-1.970, desde los años 80 Santander está en un proceso de recuperación, con  el traslado de la actividad portuaria fuera de la Bahía de Santander, al Puerto de Naos, quedando en Santander solamente la actividad de traslado marítimo de pasajeros.

Para la próxima década se prepara la modernización de la ciudad, con gran enriquecimiento infraestructural y cultural, alguno de cuyos elementos ya están en marcha, y otros aún en proyecto.

Santander es una ciudad que he visitado muchas veces, y en cada una, se puede decir que me ha servido para descubrir alguno de los monumentos, sus playas o sus rincones mas lindos, por eso hare un relato general empezando por sus lugares mas emblemáticos.

La catedral, con sus dos partes, la catedral inferior, parroquia del Cristo, o cripta, construida en torno al 1.200, sobre otros edificios mas antiguos. Su stilo es de transición entre el románico y el gótico; en la cripta reposan los restos de los santos Emeterio y Celdonio                

y la catedral alta,                                                                                         

ya que se trata de un conjunto monumental construido entre los s.s. XII a XIV sobre el antiguo monasterio en el estaban depositadas las reliquias de los santos Emeterio y Celedonio, llamada Abadía de los Cuerpos Santos, construida sobre un cerro, de manera que la iglesia comprende dos plantas superpuestas y un claustro .

En 1.754 se crea la diocésis de Santander y la abadía de los Cuerpo Santos es transformada en la catedral de la Asunción de Nuestra Señora , como cabeza del nuevo obispado.

La catedral sufrió enormes daños tanto con la explosión del buque Cabo Machichaco, en 1,893, como tras sobrevivir a la Guerra Civil, con el incendio de 1,941 y quedo muy dañada, siendo, entre los años 1.942-1,953, respetuosamente restaurada por los arquitectos Gonzalo Bringas (1.880-1943) y Juan José Resines del Castillo

En esta catedral he asistido a alguna solemne ceremonia.

Otro importante edificio es el Real Palacio de la Magdalena, situado en la península de la Magdalena, construido entre 1.909 y 1.911 financiado por suscripción popular en la que intervinieron con fondos no solo el Ayuntamiento sino gran número de familias del lugar, que ejercieron un micromecenazgo, para residencia veraniega de la familia real, que la ocupo hasta la proclamción de la II Republica, obra de los arquitectos Gonzalo Bringas, que se había ocupado de la restauración de la catedral y Javier González Riancho (1.881-1.953)´                                                                           

El Palacio es un edificio de estilo ecléctico, que combina las inflencias inglesas con las francesas y con la arquitectura tradicional de la región.

En 1.949 volvio a instalarse en el Palacio de la Magdalena, la Universidad Internacional Memendez Pelayo, pionera y decana en España de los cursos de verano y cursos de  lengua  y cultura española para extranjeros y que actualmente tambien imparte diferentes masters en diversas areas del conocimiento.

El propietario, como hijo del rey Alfonso XIII, Don  Juan de Borbón, vendio el palcio al Ayuntamiento de Santander en 1.977.

El Palcio aparece mencionado en un poema de José Hierro ( 1.922-2.002) enamorado de Santander

                                                            " La Magdalena,Soles, Sueños

                                                            Milnovecientos treinta y nueve 

                                                              Empezar a vivir de nuevo!

                                                               Y luego ya toda la vida

                                                             Y los años que no veremos"

Otro interesante enclave turistico de Santander es El Sardinero, conocido por sus extensas playas y por ser uno de los barrios mas exclusicos de la ciudad.

En sentido amplio el Sardinero comprende la costa comprendida entre el Palacio de la Magdalena y la zona de Matalascañas, formando la pequeña bahía que lleva su nombre,

Con la inauguracion del Palacio de la Magdalena, que sería la residencia de verano de Alfonso XIII y familia real, se crearon nuevos edificios al estilo arquitectónico de la "Belle Epoque" como el Hotel Real, en el que, por cierto, celebramos con mi marido y otros miembros de la familia, la entrada en el nuevo siglo, durante la cena de la Nochevieja de 1.999 y la llegada del año 2.000, el Gran Casino inaugurado en 1.916 , obra del arquitecto santanderino Eloy Martinez del Valle (1.870-1.939)

y también se procedio a la instalación de grandes balnearios: mas tarde hacia mediados del XX el Sardinero se convirtio en una zona residencial, con grandes chalets y también bloques de viviendas de alto nivel.

El Sardinero cuenta con dos playas de su mismo nombre, la Primera Playa del Sardinero

 y la Segunda Playa del Sardinero, que aunque playas distintas se unen con marea baja.

                                       

Hemos paseado muchas veces por la avenida que bordea las playas, que es muy bonita, y cuidada, y desde el Hotel Chique en el que hemos estado alojados alguna vez <,se tienen excelentes vistas del mar y de la  playa del Sardinero.

                                                                                           


Volviendo al centro de la ciudad tengo que referirme al Ayuntamiento de Santander, situado en la Plaza del Ayuntamiento, el corazón de la ciudad, cuyo edificio es de principios del s. XX; se trata de un edificio de estilo modernista ecléctico, donde estuvo el desaparecido. antes del s. XVIII, Convento de  San Francisco. El proyecto de la Casa Consistorial se debe al premiado arquitecto Julio M- Martinez Zapata (1.863-1.915); fue inaugurado en 1.907, y ha tenido, desde entonces, ampliaciones y reformas.
                                                                               

Por indicaciones de los conocedores de Santander, hicimos un bonito paseo desde muy cerca del hotel hasta el Faro de Cabo Mayor, 
                                                           


el sendero discurre en paralelo al litoral cantábrico, que toma, altura rapidamente, en un entorno, el Parque de Mataleñas, de gran riqueza botánica. 
                         asamos luego, por una pequeña playa, Los Molinucos, que solo se ve, al parecer con marea baja,
                                                                       

por el campo de golf de Mataleñas, y enseguida llegamos a los acantilados del Cabo Mayor, desde donde se tiene un magnifica vista del Sardinero, la isla de Mouro, el Palacio de la Magdalena, y mas lejos aún la isla de Santa Marina.

Seguidamente llegamos a la Playa de Mataleñas, a la que se puede acceder por una escalera bien empinada.
                                                                           

Y finalmente teniamos delante el faro Mayor
                                                                      

                                                                          
El Faro Mayor esta ubicado en el Parque del Faro Mayor, y preside la entrada de la Bahía de Santander, privilegiado balcón al mar y a la ciudad.

Hubo algún intento de construir en ese lugar un fro, pero, finalmente, el actual encendio sus luces  el año 1.839. 

El edificio es de forma cilindrica, construido en piedra de sillería; la torre tiene 30 m desde su base y 90 desde el mar, y como todos los foros que he visto su vista impresiona.

Alli se acabo nuestra pequeña excursión, y emprendimos el regreso al hotel.

Para acabar el capitulo, que es largo pero podía serlo mas, nos pasearemos por otro de los recorridos mas típicamente santaderinos el Paseo de Pereda, la calle mas emblematica y transitada de Santander.
                                                                                    

Este largo paseo, situado en el centro urbano, paralelo durante todo el recorrido a la bahia de Santander, comprende una serie de edificios construidos entre finales del s. XVIII y principios del s. XX, declarado Conjunto Histórico en 1.985.

Destaca por su monumentalidad y envergadura la sede central del Banco de Santander, obra del arquitecto Javier Gonzalez de Riancho (1.881-1.953), que funciona en este edificio desde 1.950.
                                                                                     

Otro atractivo del lugar son los Jardines de Pereda, dedicados al novelista cántabro José Mª de Pereda mismo se (1.833-1.906), que  se puede calificar como escritor realista de carácter independiente, como él mismo se describia. En los Jardines se encuentra una escultura del propio Pereda.
                                                                                   


Tengo también que mencionar otro de sus originales edificios, el Centro Botín de las Artes y de la Cultura, inaugurado en 2.017, y diseñado por el arquitecto italiano Renzo Piano (1.937)


El edificio. que destaca por sus modernas lineas y por el lugar donde está ubicado, esta formado por dos volumenes de diferente tamaño, apoyados en columnas, con gran luminosidad en el interior está dividido en dos zonas, una pra exposiciones de arte, y otra que tendrá actividades culturales y de formación.  

Sin duda, todavia hay muchas cosas interesantes que ver y que hacer en esta preciosa ciudad, he procurado hablar de las mas interesantes desde mi punto de vista, y me ha salido bastante largo, por cierto. Ya solo falta. al que se haya interesado, ir a verla. El único pequeño problema que puede encontrar es que, bien mirado Santander son como dos ciudades: la baja, al lado de la costa y llana y la alta. con gran desnivel respecto a la otra. lo que quiere decir que hay grandes cuestas y muchas escaleras urbanas, pero eso, quizas sirva para mantener la salud de sus habitantes.