lunes, 29 de febrero de 2016

Edades del Hombre. La sede: Aranda de Duero


Después de un desayuno continental, pero abundante, dejamos el Monasterio para recorrer los 18 km que lo separan de Aranda. El día era precioso, y algo caluroso, como corresponde al verano.

La ciudad, única sede de la exposición de de las del Hombre, estaba ya muy animada, supongo que algo mas que de costumbre por ser fin de semana.

Sepamos algo de Aranda antes de adentrarnos en ella.

Aranda de Duero, localidad situada al sur de la provincia de Burgos, es la capital de la comarca Ribera del Duero; cuenta con una población de mas de 33.000 habitantes.

El río Duero la atraviesa, y desembocan en el término municipal sus afluentes el Arandilla, el Bañuelos y el Arroyo de la Nava.

Tanto la localidad, como su entorno disfrutan de un paisaje casi llano sin grandes desniveles.
                                                                         
                                                                             
El origen del nombre de Aranda es incierto; puede venir tanto del latín, aranda=tierra que se ha de arar, como de otro idioma en el que significaría valle grande. La segunda parte del nombre alude, evidentemente, al gran río que la cruza.

Hay poca evidencia del poblamiento de Aranda en épocas prehistóricas, aunque su emplazamiento en un ligero altozano y surcada por tres ríos la hacen idónea para el asentamiento humano; se han encontrado algunas sepulturas, círculos de piedra y mojones que así parecen indicarlo.

En la época prerromana estuvo poblada por varias tribus celtíberas como las de los pelendones, arévacos y vacceos que después de oponerse a la conquista romana, con episodios como el sitio y caída de Numancia y otros acontecimientos guerreros, pasaron a ser romanizadas por completo.

Tras la invasión islámica de 711, y el establecimiento del reino de Asturias, por los nobles visigodos comandados por Pelayo y apoyados por los habitantes de esta región, hubo continuas escaramuzas entre cristianos y musulmanes para conseguir botín y en el caso de los reyes asturianos para repoblar el territorio, con el fin de aumentar su capacidad trabajadora y guerrera.

Se produjo, por siglos, un gran espacio vacío de gente y de cualquier otra actividad que no fueran las razzias, en busca de botín, que se ha dado en llamar Desierto del Duero o Campos Góticos, en el cual estaba incluida lo que luego llego a ser Aranda de Duero, entre otras muchas localidades.

Aranda fue fundada por el rey Ordoño I en 861, pero este primer asentamiento fue destruido por los musulmanes en el mismo s. IX,

A pesar de la repoblación llevada a cabo en esta zona del Duero burgalés a comienzos del s. X, y de la función estratégica como vigilante del único puente que entonces existía para cruzar el río, la primera mención de Aranda data de 1.088, en el Concilio de Husillos, Palencia, en que se cita como una fortaleza levantada contra los moros.

Nacida como lugar de realengo, la ciudad se convierte en los s.s. XIV y XV en centro económico y administrativo de la zona, como es prueba la celebración en ella del Concilio de Aranda en 1.473, para la reforma del clero, y el haber sido residencia casual de Juana la Beltraneja y de su contrincante por el trono de Castilla, Isabel la Católica.

El centro histórico de Aranda conserva la trama urbana de hace 500 años, como atestigua el plano de la ciudad de 1.503, que fue utilizado, como referencia para el trazado de muchas ciudades del Nuevo Mundo, por los españoles que las fundaron. En el documento, que está depositado en el Archivo General de Simancas, se ve representada la ordenación de Aranda en la cual se pueden reconocer edificios y calles que han llegado hasta el día de hoy.
                                                                   


Aranda adquiere identidad propia a partir del s. XIII, en el que depende del rey Sancho IV de Castilla, y se constituye, por lo tanto, en villa de realengo

Entre los s.s. XIV a XVI Aranda vive una época de gran esplendor, pues se convierte en punto estratégico para la comunicación entre las dos Castillas, Aragón y Francia, lo cual favoreció su desarrollo económico, político y social, mientras mantenía su producción agrícola y vitivinícola. En estos siglos se levantan conventos, palacios y casonas, gran parte de los monumentos que adornan la ciudad.

En el s. XVII comienza una decadencia, con notable disminución de población, decadencia de la cual se recuperara en el s. XVIII; pero como en otras muchas villas y ciudades de España la invasión napoleónica de 1.808, causa terribles trastornos, pues en el propio termino se desarrolla una cruenta batalla en 1.812, en la que intervino el guerrillero Duran, que causo, con sus acciones en la retaguardia francesa, sensibles perdidas.

Hoy día es una ciudad, con un importante parque industrial, y con un pujante sector agrario, en que el cultivo de la vid y la elaboración del apreciado vino con D.O. Ribera del Duero, son fuente importante de su prosperidad.

La gastronomía es uno de los puntos fuertes de la localidad, pues además del vino Ribera del Duero, tiene reconocidos con D.O., el lechazo asado, la morcilla de Aranda, variedad local de la morcilla de Burgos y la Torta de Aranda.

Así que ya estábamos en Aranda, tras el corto traslado desde La Vid. Dejamos el coche en un aparcamiento al aire libre habilitado por el Ayuntamiento, para absorber la gran cantidad de visitantes, y nos dispusimos a recorrer la ciudad, para empezar por la visita a la iglesia de San Juan, una de las dos sedes de la exposición de Las Edades del Hombre.

 Antes de llegar a la iglesia tuvimos una agradable sorpresa al encontrar el busto del general Antonio Gutierrez de Otero y Santayana, ilustre arandino, Comandante general de las Islas Canarias,  y teniente general de los Reales Ejércitos, que ha pasado a la historia por haber derrotado al almirante británico Horacio Nelson, el 25 de julio de 1.797, cuando trataba de tomar el puerto y plaza fuerte de Santa Cruz de Tenerife.
                                                                 

La iglesia de San Juan, donde fue bautizado el general Gutierrez, está al lado de este busto, así que pasamos a, primero contemplarla por fuera, y luego a la exposición.
                                                                                         

La iglesia construida en el s. XIV es de estilo gótico isabelino con algunos elementos  aprovechados de un templo románico anterior, como el muro este. Está situada entre los ríos Duero y Bañuelos y asociada al nacimiento de la villa

Tiene adosada la mayor torre defensiva de la villa, cuyos dos primeros cuerpos datan del s.IX, 

Se la puede ver y contornear sin ninguna dificultad, pues está en una agradable placita, y así contemplar su preciosa fachada principal, del s. XV y la esbelta torre
                                                                                       
             
La exposición Edades del Hombre está dedicada, en la XIX edición, a la Eucaristía, dividida en cuatro capítulos, de los cuales, en la iglesia de San Juan se desarrolla el cuarto de ellos, Mirabile sacramentum (Sacramento admirable), mostrando los aspectos mas religiosos y trascendentes de la Eucaristía, centrados en la figura del cuerpo de Cristo y su significado para la religión cristiana en el Nuevo Testamento, con tres etapas:


  • Orígenes en Jesús, 
  • Institución de la Eucaristía y 
  • La primitiva iglesia.


Este cuarto capitulo se divide en varios apartados, el primero de los cuales es "Salutare conviviun" ilustrado entre otros, con el cuadro, de los comienzos de Joaquín Sorolla, "La Primera Comunión de Carmen Margariñas"
                                                                         

o por esta parte del Retablo de la Iglesia de San Hipólito, de Támara, Palencia, sobre la vida de su titular San Hipólito.
                                                                          

 El segundo bajo el nombre de "In mei memoriam" está centrado en la muerte y resurrección de Cristo, como es muestra ese impresionante Cristo yacente, talla en madera policromada  de Pedro de Ávila (1.678-1.742)
                                                               
                                                                                     
o la escultura de madera policromada "Ángel recogiendo la sangre del cordero" de Juan Sanz (1.607) que proviene de la iglesia de Santa María de Catalañazor de Almazán (Soria).
                                                                             

En el tercero "Vinculus caritatis" podemos contemplar entre otras obras de calidad, el cuadro atribuido a Plácido Constanzi (1.746) San Pedro Regalado sale del sepulcro para socorrer a un mendigo
                                                                           

o la escultura de Alejandro Carnicero (1.738) que representa a San Martín partiendo su capa con un pobre, que se encuentra en la iglesia parroquial de Cogerces (Valladolid)
                                                                                     

Los tres primeros capitulos se desarrollan en la iglesia de Santa María la Real.

La exposición ha coincidido con el V centenario de la finalizacion, entre 1.514-1.516, de la magnifica fachada de estilo gótico isabelino de esta iglesia.
                                                     


La iglesia actual construida sobre otro templo anterior de estilo románico, del cual solo queda una torre, se comenzo a edificar en 1.439, a menos de un km de la iglesia de San Juan, que hemos visto anteriormente.
                                                                           

Como suele suceder en estas exposiciones el continente es  mas importante aun que el contenido.

El primer capitulo de la exposicion "Panis quotidianus", el pan de cada día., quiere hacer evidente la mirada del Salvador sobre los objetos y acontecimientos comunes, para lo cual nos propone algunos ejemplos.

Como este bajorelieve, perteneciente al retablo mayor de la iglesia de Santa María la Mayor de Briviesca (Burgos), que represnta la parabola del El pobre Lazáro y el rico Epulon, realizado en el taller del escultor Manuel de Agreda, (1.772-1.843)


o este cuadro sobre el Milagro en el banquete del apostol santo Tomas, procedente de la Colegiata de Covarrubias, atribuido al Maestro de los Balbases, finales del s. XV


Y por poner un ultimo ejemplo del apartado, aqui está el bajorrelive "Ultima cena" de Felipe Vigarny (1475-1.543), escultor y tallista borgoñon, radicado en españa,  procedente de la vecina iglesia de San Juan de Aranda.
                                                                       

Estas tres propuesta ilustran certeramente el capítulo I.

El II capitulo llamado Antiquum documentun, Antiguo testamento, prehistoria de la eucarístia, se refiere a los hechos que anuncian, veladamente, lo que mas tarde se convertira en realidad, en los cuales se inspira en Nuevo testamento.

De los muchos preciosos objetos de la exposicion que tratan de este tema elegire dos
                                                               

El sacrificio de Abraham, procedente del sepulcro de los reyes Juan II e Isabel de Portugal, padres de Isabel, la Catolica en la Cartuja de Miraflores.

El precioso bajorelieve en alabastro es obra de Gil de Siloe (1.440-1.501) e ilustra la obediencia del profeta Abraham que no dudo en sacrificar a su hijo Isaac, por orden de Yhave, su dios. Su fidelidad le valio la bendición de Dios para el y su descendencia.
                                                            

Y para acabar con este capitulo el magnifico Sagrario-Tabernaculo, procedente de la iglesia parroquial de San Román de Villaherreros (Palencia), realizado por el orfebre Manuel Alvarez, 
s. XVI

El III Capítulo "Cena Novissima", explica el nacimiento de la eucaristia, y para acompañar la explicación se
exhiben algunos cuadros importantes como la  Santa Cena del notable pintor Bartolomé Esteban Murillo (1.617-1.682), oleo procedente de la iglesia de Santa María la Blanca, de Sevilla
                                                                           

o este cuadro de la Resurrección de Jesús, del taller de Juan de Borgoña que se encuentra habitualmente en el Convento de la Anunciación, mas conocido como las "Ursulas" de Salamanca
                                                                    
                                                            
Interesante, ademas de magnifico, es el caliz mostrado en la Exposición; se trata del Caliz de los Condestables de Castilla. realizado en 1.487, con oro, perlas, piedras preciosas y esmaltes, que procede del Museo de la Catedral de Burgos, de gran importancia historica y artistíca, podemos decir, la mejor y mas extrordinaria pieza de la exposición .
                                                                   

Estas y otras notables piezas, tanto de artistas de otros siglos, como tambien modernos y actaules, forman un magnifico conjunto en esta XIX Exposición de las Edades del Hmbre organizada por las diocesis de Castilla-León, a traves de la Fundación Edades del Hombre.

Disfrutamos durante mas de dos horas de la visita a las dos sedes arandinas y luego, para reponer fuerzas, comimos en uno de los mas conocidos restaurantes del centro de la ciudad "El lagar de Isilla", en la calle del mismo nombre, con un menu castellano tipico de Aranda, morcilla de Aranda, cordero lechal asado, y un deliciosa milhojas, todo ello con vino de Ribera del Duero, como no podia ser menos.
                                                                             

Despues tan opipara comida, dimos un largo paseo a la vera del río Duero, que en Aranda se muestra grande y frondos.

                                                               


Tras este agradable paseo volvimos a nuestra base en el Monasterio de la Vid, donde pudimos asistir a vísperas, recitadas por los monjes agustinos que habitan el convento y llevan la hospedería. Al acabar los rezos pasamos todos, monjes y huespedes, al refectorio o gran comedor donde se nos sirvio una  sencilla y buena cena.

lunes, 22 de febrero de 2016

Puré de guisantes secos

                                                          


Los guisantes secos pertenecen al apartado de legumbres dentro de los alimentos: son por lo tanto buenos y necesarios para la salud; tienen ademas numerosos nutrientes, fibra y vitaminas, y...ademas resultan deliciosos en este sencillo puré que os propongo.                                                                                         

Ingredientes

                                                                         

350 g de guisantes secos
1 cebolla
1 hija de laurel
1 diente de ajo
1 ramita de perejil
lacón
40 g de mantequilla
250 ml de leche
agua
sal picatostes fritos

Elaboración


Poner los guisantes a remojo en agua fría unas 12 horas antes de cocinarlos.

Poner en la olla express 1 litro de agua fría, los guisantes escurridos, la cebolla pelada y partida en dos, el lacón, el ajo, laurel y perejil.
                                                                             

Cuando la olla indique que esta a presión máxima, bajar el fuego y dejar cocer 1/4 de hora.

Despues de que la presión baje del todo abrir la olla, retirar el lacón.

Poner los guisantes con su caldo, la sal, la leche caliente y la mantequilla y pasar todo por la batidora, hasta que quede bien fino.
                                                                     


Quitar del lacón cocido los huesecillos y la corteza; hacer cuadritos pequeños y colocarlos encima del puré.

Servir bien caliente con picatostes fritos.
                                                                       

lunes, 15 de febrero de 2016

Edades del Hombre. 1ª Etapa: Sarracín, Monasterio de La Vid

                                                                   
Como todos los años, en esta ocasión en pleno verano, dedicamos tres días a la visita de la XIX muestra de las Edades del Hombre, instalada en Aranda de Duero.

Es un buen motivo para ir conociendo las históricas e interesantes ciudades, pueblos y villas de Castilla León.

Toda la región conserva, a pesar de cierta antigua desidia, de las invasiones y otros desastres importantes monumentos arquitectónicos y de todas las demás artes, cuadros, esculturas, mobiliario etc, muestras de su glorioso pasado histórico.

En estas exposiciones no solo hay arte de la ciudad o villa, sino que debido a que siempre tienen un tema conductor, se reunen en cada una  cuadros, esculturas, objetos, etc., procedentes de lugares de la región, y otros mas alejados, que serian complicados de ver, tanto por los km que habría que recorrer, como por estar en pequeñas iglesias, monasterios o fundaciones diversas.

El tema de la Exposición de este año ha sido Eucharistia, con dos sedes en Aranda de Duero, las iglesias de Santa María la Real, de la cual se commemora el V Centenario de la finalización de su extaordinaria fachada gótico-isabelina y la  iglesia de San Juan.

En esta ocasión nuestra residencia de tres días, iba a ser en el Monasterio de La Vid, localidad a 18 km de Aranda, que, regentada por monjes agustinos, ofrece hospedería, desde pensión completa, media pensión, desayuno y habitación o solo esta última.

Fue una buena elección, pues estuvimos muy a gusto en el monasterio, del cual volveré a hablar mas adelante.

Como se hizo el tiempo de comer, paramos en un pueblo cercano a Burgos, que me parecía de algún interés: Sarracín.

Dos palabras sobre este pequeño núcleo urbano.
                                                                       

Sarracín pertenece a la comarca del Alfoz de Burgos, con una población de algo menos de 300 habitantes, atravesada de este a oeste por el río Ausín, afluente del Arlanzón, y que actualmente crece por su posición estratégica, al lado de la autovía A1 y  a 8 km de la capital, que la está haciendo aumentar en habitantes, como lugar de descongestión de Burgos.

Su historia está vinculada a la familia Sarrazino, que aparece citada por primera vez en un documento del año 963, firmado por el obispo Sarrazino y el diacono del mismo nombre, en el cual el abad don Mancio entrega el pequeño monasterio de Santa María, junto al río Cavóa, al Monasterio de San Pedro de Cardeña.

                                 "...in flumine Kabia, locum qui vocitant Villa de Sarrazino"

Otro interesante episodio histórico fue la residencia, en estos lugares, de Isabel de Osoro,  dama de la corte de Carlos I, que llego a ser amante de Felipe II durante años, hasta que este príncipe contrajo su segundo matrimonio con María Tudor, momento en que Isabel tuvo que dejar la corte, pero no su relación con el ya rey, Felipe, retirándose a una gran heredad que había recibido, en los términos que comprendían, entre otros pueblos, Sarracín.

Muy cercano a esta población se hizo construir el magnifico Palacio de Saldañuela, que no visitamos en esta ocasión, donde vivió el resto de su vida, sin casarse nunca.

Los aldeanos no estuvieron nunca conformes con la manera de llevar su extensa propiedad  Isabel de Osoro, que mandaba expulsar de ella a los cazadores, pescadores y a cuantos se atrevían a entrar en sus dominios, y, además de llenarla de insultos, que han durado en el tiempo, aunque hoy día poca gente sabe que la llamaban "la puta del rey", pleitearon contra ella, sin lograr nada pues la jurisdicción le dio la razón, como propietaria que era.

Quizás alguien, seguidor de la serie Carlos, rey y emperador, que acaba de emitir  la TV1, se acuerde del nombre de Isabel de Osoro, que sale en varios capítulos, cuando Felipe II, entonces príncipe heredero, la ronda por los pasillos del palacio y la visita en su alcoba.

Bien, pues después de comer, comida nada memorable, visitamos los pocos monumentos que quedan de tan antiguo pasado, empezando por la iglesia parroquial de San Pedro.

La iglesia de San Pedro fue levantada entre los s.s. XVI y XVII,  tiene fachada renacentista coronada por una espadaña-campanario de dos arcos y  y ha sido restaurada recientemente, su interior es de cruz latina, crucero y ábside rectangular.

La puerta renacentista tiene una vidriera encima. Es austera pero bella, se sube a ella por unas escaleras, ya que está situada en la mayor elevación del pueblo. El renovado interior no lo vimos por estar cerrada a esas horas
                                                                                   
                                                                       
Otro monumento, cercano a la iglesia es la Torre de los Salamanca, llamada también palomar.
                                                                                     

Se trata de una torre construida en el s. XV, que todavía ostenta cierta gallardía.

El ultimo monumento al que nos acercamos fue la Ermita del Santo Cristo de los Buenos Temporales, curioso nombre, que es el último vestigio del Convento Sancti Sspiritu, de monjes trinitarios redentores de cautivos en tierra de moros, que allí hubo, fundado por doña Isabel de Osoro.

En su interior, en el que tampoco pudimos entrar, de una sola nave contiene diversos objetos sacros de importancia.
                                                                             

Tras esta corta pero interesante parada y visita, seguimos ruta para llegar a la que iba a ser nuestra residencia durante tres día el Monasterio de La Vid.

Me gusto mucho haber descubierto este monasterio con hospedaje a través de internet, pues tengo que confesar que no lo conocía ni de nombre, pero ahora cualquier lugar, y este, en concreto no es cualquier lugar de ninguna manera, está al alcance a través de la red.

Pasada Aranda, al cabo de unos 18 km, se ve de repente la blanca y grande espadaña de este magnifico edificio, y poco después el monasterio entero.
                                                                             

                                                                                 

El gran complejo monástico de Santa María de La Vid, fue construido a mediados del s. XII. Dos nobles castellanos Sancho Ansurez y Domingo Gómez de Campdespina, estudiantes en París, trabaron amistad con Norberto de Xanten, futuro San Norberto, fundador de la Orden de Premontré, del nombre de la localidad francesa cercana  a la Abadía de San Martín de Laon, donde ambos profesaron.

De vuelta a Castilla ambos fundaron dos abadías, correspondiendo la fundación del segundo  monasterio Premonstratense en España, Santa María de Monte Sacro, a Domingo Gómez de Campdespina, hermano bastardo de Alfonso VII, como hijo que fue de la reina doña Urraca y del caballero Gomez Gonzalez de Salvadores, y que estuvo situado en la orilla derecha del Duero, a dos km aproximadamente de su emplazamiento actual.

No se conoce la fecha exacta de su construcción pero si se sabe que en 1.152 Alfonso VII otorgo a la comunidad monástica los terrenos de La Vid, donde se empezó a erigir, de inmediato, la nueva abadía, cuya construcción duro seis o siete años, de manera que ya estaba acabada hacia 1.160.

El primitivo monasterio de estilo románico, gozo de la protección de los reyes castellanos Alfonso VII y Alfonso VIII. La protección real continuo con Sancho IV, que en 1.288 doto al monasterio de
la financiación necesaria para renovarlo y ampliarlo, y del cual dependían otras quince abadías y que ya contaba con un patrimonio importante.

Los sucesivos abades se convirtieron en señores feudales, que dirigían en lo espiritual y en lo temporal a canónigos y vasallos.

Mientras en las nuevas construcciones se paso del románico al gótico.
                                                                         
                                                                   
En 1.516, el abad Iñigo López de Mendoza consiguió que el Papa le concediese el nombramiento de abad comendatario.

Queriendo convertir el monasterio en el panteón de su familia, la casa condal de Miranda proyectó y ejecutó profundas reformas en el complejo monástico. Se hizo, entonces un nuevo claustro que sustituyo al anterior, románico y se construyo la iglesia, que podemos admirar ahora.
                                                                             

La Desamortización de 1.835 puso un punto final a la presencia de monjes premonstratenses después de 700 años de fecunda historia.

Sucedieron, entonces, treinta años de desolación y abandono durante los cuales el monasterio de La Vid se vio sometido a un  tremendo expolio, perdiendo los fondos seculares de su biblioteca y gran parte de las numerosas obras de arte conservadas por la comunidad premostratense, hasta que fue adquirida por la Provincia de Filipinas de la Orden de San Agustín, que la destino a casa de formación y estudio de sus religiosos, y de donde salieron centenares de misioneros hacia Filipinas, donde fundaron pueblos, iglesias, colegios y hasta una Universidad.

La iglesia actual fue construida en 1.522 costeada a partes iguales por el Cardenal Mendoza (1.433-1.495, Arzobispo de Toledo, Primado de España, Canciller Mayor de Castilla y su hermano el conde de Miranda.

Conserva la imagen gótica de Santa María de La Vid, del s. XIII, que preside la capilla mayor, desde un esplendido retablo renancentista.

En el fondo de la iglesia está situado el coro donde la comunidad agustina continua celebrando la liturgia;
                                                                     
                                                                                coro
                                                                               
                                                               detalle de la sillería del coro

tuvimos ocasión de compartir con ellos las Visperas; me resulto una gran e inusual experiencia espiritual.
                                                                                   

tras las cuales se pasaba al refectorio con los monjes y los demás huéspedes, para la cena. El refectorio es de planta rectangular; encima de la mesa, que ocupan los monjes, hay un gran lienzo que representa La Santa Cena, de la escuela romana y del s. XVIII.

En cuanto a la iglesia es magnifica, podría decir grandiosa, tanto en el exterior, como por sus proporciones y por los tesoros arquitectónicos y de decoración del interior; tiene tres naves, y un gran crucero concebido para servir de panteón a los hermanos Iñigo Lopez de Mendoza y Zuñiga, abad del monasterio  y Francisco de Zuñiga, III Marques de Miranda del Castañar.

Se empezó a construir en 1.522, terminandose por completo tras las diversas obras, mas de dos siglos después, en 1.737.


                                                                   
El esplendido retablo mayor está presidido por una bella imagen gótica de Santa María de la Vid.


                                                                          
La sacristía, encargada por el abad Bernardo de León en 1.625, es una sala rectangular, de amplias proporciones.
                                                                 

   El claustro, otro de los espacios destacados del monasterio, tiene dos pisos.
                                                                 

.El inferior fue comenzado en 1.517, para  sustituir a otro anterior románico, de cuya época se conserva la fachada de la primitiva Sala Capitular, del s. XII, con una preciosa ventana geminada.
                                                                             

Varios abades premostratenses están representados en grandes cuadros,
                                                           

 como este de uno de los notorios abades, ya citado, Iñigo Lopez de Mendoza.
                                                                         
.
El piso superior es del s. XVIII sustituye al que hubo en el XVI.

Aunque todo el monasterio se puede considerar un museo, desde 1.992 se ha acondicionado la antigua despensa, obra arquitectónica del s. XVIII, como museo especifico dentro del monasterio donde se exponen algunos de los tesoros que han llegado hasta nuestros días.



El Monasterio fue mostrado por una eficiente guía, que explico de manera aceptable toda las dependencias.

Toda una experiencia la visita a este importante y bien conservado monasterio de nuestro país.

lunes, 8 de febrero de 2016

Tarta Sacher

                                                         

Un poco de historia sobre esta deliciosa tarta de choclate.

La tarta Sacher (Sachertorte en aleman) es tipica de la ciudad de Viena, aunque se hace y se puede degustar en toda Austria. Fue inventada en 1.832 por el entonces joven aprendiz de reposteria Franz Sacher. Despues de un prolongado periodo fuera de Viena, regreso y adquirio una tienda de delicatessen y vinos.

Pero fue su hijo Eduard también joven aprendiz de repostería en la confiteria vienesa Demel, el que confeccionaria la tarta inventada por su padre.

En 1.876 Eduard fundo el Hotel Sacher, donde comenzo a servir y vender la Tarta Sacher.

La propiedad de la receta fue objeto de disputas en el s.XX entre los herederos de Sacher, dueños del hotel, y la pastelería Demel, hasta que la justicia dictamino que ambos tenían derecho a vender la tarta con dos nombres distintos: el hotel como Original Sachertorte y la pasteleria Eduard Sachertorte.

Ingredientes
                                                                     
 6 huevos
150 g de chocolate negro del 70%
150 de mantequilla
180 g de harina
180 g de azúcar
50 g de azúcar glas
1 pizca de sal
200 g de mermelada de albaricoque

Para la cobertura
                                                       

150g de chocolate negro del 70%
150 g de mantequilla

Elaboración  

Fundir el chocolate troceado en el microondas, a poca intensidad o al baño maría.


Batir la mantequilla reblandecida con el azúcar glas y la pizca de sal.
                                                                           
   
  Separar la claras de las yemas y añadir las yemas a la mezcla anterior, de una en una.

Montar las claras a punto de nieve. Antes de acabar el montado añadir el azúcar y completar el montado.

                                                                                   
Agregar el chocolate fundido ala mezcla de yemas y mantequilla , remover con una espátula y añadir la harina tamizada.
                                                                                 

Cuando todo este bien unido incorporar las claras montadas, empezando por una cucharada con movimiento envolvente de abajo a arriba y continuar con el resto de las claras montadas, siempre con el mismo movimiento.

Verter la masa en un molde redondo engrasado y meter en el horno precalentado, a180ªC, durante 45 minutos.
                                                                           

Comprobar que este cocido por dentro introduciendo una aguja de tricotar fina por el centro del bizcocho que tiene que salir limpia cuando el bizcocho está cocido.

Calentar la mermelada para que este fluida.

Cortar el bizcocho por la mitad y extender la mermelada tibia sobre la parte inferior.
                                                                 


Cubrir con la otra parte del bizcocho.

Reservar en la nevera.

Preparar la cobertura.

Fundir el chocolate y la mantequilla en el microondas a baja intensidad o al baño María.

Dejarlo reposar 2 minutos o hasta que este un poco mas espeso y untar la tarta, cubriendo la superficie y los laterales. Para que no se pringue la bandeja sobre la que se va a presentar la tarta, poner un papel sulfurizado debajo del perímetro de la tarta y quitarlo después de cubierta la superficie y los laterales.
                                                                               

Volver a ponerlo en la nevera, una hora al menos y decorarlo como mas guste.
                                                                           


lunes, 1 de febrero de 2016

6º día en Jordania: Aqaba

                                                                                       

 Amaneció un nuevo día en el que íbamos a disfrutar del maravilloso Golfo de Aqaba.

Antes de pasear por ese mar azul intenso, con ese cielo igualmente azul, sepamos algo de la zona.

El Golfo de Aqaba, cuyas aguas, que vierten en el Mar Rojo, a través de los estrechos de Tiran, separan la Península del Sinai de la Península Arábiga.
                                                             

Políticamente sus costas pertenecen a cuatro estados, Arabia Saudí, Egipto, Israel y Jordania, que posee allí 12 km2.

En 1.965 el rey de Jordania Hussein I, cambio 6.000 km2 del interior desértico de su país, por esos km de costa, con el vecino rey de Arabia Saudí, para proporcionarse una salida al mar.

Desde la mas remota antigüedad, el final del Golfo de Aqaba fue poblado por el ser humano, que ha dejado sus huellas. Se llamo en aquellos tiempos prebíblicos Ayla.

El rey de Israel Salomón estableció allí la base de su gran flota mercantil, en  Ezion Gaber, a solo 3 km de la actual Aqaba, en el s. X a.C, de hecho solo 30 km separan la Aqaba jordana de  la ciudad israelí de Elitat, situada en el mismo golfo de Aqaba.

Posteriormente paso a ser posesión de los ptolomeos egipcios; los nabateos hicieron de ella un emporio comercial, desde donde se exportaban incienso, especias y mirra, además de objetos de metal y cerámica.

En 106 d.C, cuando Trajano conquista el reino nabateo, paso a formar parte del Imperio Romano y siguio siendo un floreciente emporio comercial gracias a la culminación de la "Vìa Nova Traiana" que comunicaba la zona con la actual Siria.

 Durante el imperio bizantino, fue arzobispado, para pasar luego a formar parte del reino gashánida, dinastía árabe cristiana, hasta la conquista musulmana, tras la legendaria batalla de Tabuk de 630, comandada por el propio Mahoma.

Sin embargo durante la ocupación islámica la ciudad continuo siendo arzobispado, y un enclave cristiano, a pesar de ser lugar de paso de los peregrinos a La Meca.

Fue reconquistada por los Cruzados en 1.116 y anexionada al reino de Jerusalén, pasando de nuevo a los musulmanes en 1.187.

Luego cayo en manos de los mamelucos, que le pusieron el nombre actual de Aqaba y que construyeron un caravanserrallo fortificado, sobre la fortaleza edificada por el caballero cruzado Reinaldo de Chatillon.

El dominio otomano (1.516-1.917) supuso el declive de la ciudad, acelerado después de la apertura del canal de Suez en 1.869.

En 1.917 fue conquistada por las tropas del príncipe hachemita Feisal y sus aliados ingleses que ayudaban y dirigían, en gran parte, comandado por el famoso coronel ingles Lawrence de Arabia, la llamada Revolución árabe, que consiguió sacar de unos grandes territorios al Imperio otomano, hasta entonces dueño de todo Oriente Medio y de parte de Europa.

En 1.925 Aqaba paso a formar parte de Jordania.

Hoy día Aqaba es un emporio turístico, que aprovecha su gran patrimonio natural, clima cálido con una temperatura constante todo el año, costa bordeada de las estribaciones de los macizos montañosos que la rodean, y que esconde fondos marinos de gran riqueza, donde un sinfín de variados peces de colores viven en esas aguas cristalinas, y se mueven entre los arrecifes de coral, tambien de diversos colores.
                                                                       

En estos momentos hay grandes obras de transformación, para conseguir el desarrollo turístico y urbano de la zona, con atención a la preservación de su riquezas naturales, a lo cual ayuda mucho su condición de Puerto Franco, que atrae inversiones por los beneficios fiscales que apareja.

Bien, pues nos disponíamos a pasar un día entero en este fascinante Golfo de Aqaba, tanto por su milenaria historia como por sus condiciones ambientales y geográficas.
                                                                     

Tras un buen desayuno, llegamos, en el autobús, hasta un pequeño embarcadero, donde nos esperaba un yate para ir aguas adentro, siempre cercano a la costa. El suelo del barco era de cristal así que pudimos ver diferentes arrecifes de coral de formas y colores variados. Una maravilla.
                                                                 

El arrecife de coral bordea toda la costa de Aqaba a lo largo de 25 km, hasta la frontera con Arabia Saudí. No hay arrecifes en alta mar.

El arrecife comienza literalmente en la orilla y se extiende como los dedos de la mano, formando cumbres y descensos bruscos.

Es un gran espectáculo que contemplamos mientras nuestro barco, que tenia el fondo de cristal, avanzaba lentamente. Los corales son de muchos colores, tanto se ven azules como rosas, no vimos rojos, pues esos están a mas profundidad y solo los pueden ver los buceadores; hay un gran diversidad biológica, con preciosos peces de colores, que nadan entre los corales.

El deporte del buceo está muy promocionado y extendido en Aqaba, donde hay muchas facilidades para su práctica.

Después de un buen rato de contemplar los peces y los corales como si de una película o documental se tratara, tuvimos otra diversión, que fue un baño en las tranquilas aguas del Golfo. Nos proporcionaron todo lo necesario para hacer snorkel, pero yo preferir nadar un rato.

Una vez en el barco, de nuevo, puso rumbo hacia un restaurante al aire libre donde nos esperaba un buffet muy parecido a los que venimos tomando en el resto del país. Lo que cambiaba y lo hacia agradable eran las vistas al mar, y a los montes de la Península del Sinai, que se veían en la lejanía.

Finalizada la comida volvimos al hotel y tras un pequeño descanso aprovechamos la estupenda oferta del hotel, con varias piscinas y también playa.
                                                                       

Yo elegí la playa donde disfrute de un tonificante baño, mientras mi marido opto por alguna de las  piscinas.

                                                                           
Después de tomar una copa en el pequeño bar, pasamos al bufet, en este caso esplendido, del hotel, donde tomamos nuestra última comida en Jordania, con un poco de pena de no haber tenido mas tiempo en Aqaba, que me pareció una etapa fantástica de nuestro viaje a Jordania.

Al día siguiente, sin tiempo para desayunar, nos trasladaron al pequeño aeropuerto de la ciudad y volvimos a Amman y de allí a casa.